back to top
sábado, 23 noviembre 2024
InicioCríticaSimone: Engáñame si puedes

Simone: Engáñame si puedes

Por Omar Tubio

Si hubiera que buscar un común denominador en la escueta pero jugosa filmografía de Andrew Niccol, tanto de guionista como de director, sin duda sería el engaño. Tanto el personaje genéticamente imperfecto de Ethan Hawke en Gattaca (1997), que busca engañar a toda una Organización, como el universo ficticio creado para Truman Burbank (Jim Carrey) en The Truman Show (1998) nos hablan del arte de la simulación, de hacer creer algo que no es. Pero lo interesante del caso es que el espectador nunca es el engañado, siempre es el cómplice, lo que hace más disfrutable la operación.

Con Simone, Andrew Niccol lo vuelve a hacer. Y esta vez, luego de la televisión le toca al cine, mejor dicho a la industria del cine y a todos sus componentes. En un momento donde las estrellas detentan el poder y hacen y deshacen a su antojo, y donde en algunos casos se llevan casi la mitad del presupuesto de un film, el guión del mismo Niccol pone el dedo en la llaga y mediante una mirada satírica e impiadosa no deja títere con cabeza. De esta manera quedan ridiculizados las divas que se ofenden por considerar demasiado pequeño el tamaño de sus trailers, los jerarcas de los estudios que saben mucho de marketing pero desconocen quien fue John Ford o Frank Capra, los paparazzi que sólo sirven para la comidilla del ambiente y el gran público, siempre listo para adorar a una nueva estrella con la misma voracidad y rapidez que luego tarda en destruirla.

Simone está lejos de ser un gran film y de hecho le sobran un par de secuencias totalmente descartables (la de la autopista con el maniquí en el auto por ejemplo), que hacen que la película parezca lo que no es: una comedia de enredos; pero posee diálogos tan ingeniosos e ideas tan sorprendentes que lo demás pasa a un plano menor.

Al Pacino compone aquí a Victor Taransky, un director en decadencia al que su estrella principal deja plantado a poco de comenzar el rodaje de su film. Por circunstancias que no develaremos, llega a sus manos un software que le permitirá zafar del entuerto, pero claro, a un costo que él mismo no imagina. Se trata literalmente de una actriz virtual que contiene en sí misma lo mejor del desaparecido star system hollywoodense: algo de Jane Fonda, una pizca de Laureen Bacall, otro poco de Grace Kelly y la gracia y elegancia de Audrey Hepburn… Algo así como el sueño de cualquier director. Tomando los debidos recaudos Taransky consigue terminar su obra, y Simone (ese es su nombre) se convierte en una estrella de la noche a la mañana. Así, como en la novela de Mary Shelley, Frankenstein, la “criatura” comienza a tener casi una vida propia y a ser requerida por los medios que la adoran con frenesí, convirtiéndose para Taransky en un arma de doble filo e imposible de sostener. Pero… ¿cómo ponerle fin?

Al Pacino se entrega al juego sin medias tintas en una desatada y calculada sobreactuación que la película le exige, porque no jodamos, esto no es para que se lo crea nadie, sino para reírse y pensar un poco en lo que se ha convertido hoy en día la industria del cine. En este sentido son absolutamente desternillantes los frustrados intentos de Taransky por destruir la imagen de Simone, haciéndole filmar supuestos “films d´art” comiendo en un chiquero junto a los cerdos, o dando entrevistas a la CNN totalmente drogada y con declaraciones políticamente incorrectas.

Con respecto a Simone, la encargada de darle vida es una modelo canadiense sin experiencia en el cine llamada Rachel Roberts, que resuelve muy bien… como actriz virtual. Y en un papel corto pero jugoso recuperamos a una Winona Ryder bellísima y en plena forma.

Es obvio que frente a sus dos obras anteriores (una como guionista y otra como director), Andrew Niccol ha bajado un escalón y no ha conseguido redondear plenamente la idea, pero de ninguna manera se trata de un traspié grave y sigue siendo un director interesante para seguir. Además, ver a Pacino en su salsa es un aliciente adicional. ¿De cuántos actores se puede decir lo mismo?

Título: Simone.
Título Original: S1m0ne.
Dirección: Andrew Niccol.
Intérpretes: Al Pacino, Catherine Keener, Evan Rachel Wood, Pruitt Taylor Vince, Jay Mohr, Rachel Roberts, Jason Schwartzman, Jeffrey Pierce, Sean Cullen, Rebecca Romijn, Elias Koteas, Winona Ryder.
Género: Comedia, Drama, Ciencia-ficción.
Clasificación: Apta mayores de 13 años.
Duración: 117 minutos.
Origen: EE.UU.
Año de realización: 2002.
Distribuidora: Distribution Company.
Fecha de Estreno: 23/01/2003.

Puntaje: 7 (siete)

NOTAS RELACIONADAS

Dejar una respuesta

Please enter your comment!
Please enter your name here

ÚLTIMAS PUBLICACIONES

Hereje: Cuando la fe está en juego

San Pugliese: Como nombrar al pueblo

Dueto: Amigos para siempre

Tiempo de pagar: Zafar a toda costa