Por Omar Tubio
Esta es una película que convendría no dejar pasar. A pesar de un título que no dice mucho (¿por qué no dejar simplemente el original Trece?) y de un afiche 
algo engañoso que pareciera remitir a esas anodinas comedias de adolescentes poco pretenciosas como las que protagonizaban Molly Ringwald o Alicia Silverstone en su momento, A los trece –premiada en Sundance- está más cerca de los films de Larry Clark (Kids, Bully) por su estética y por los temas que abarca, aunque sin la carga sexual que roza lo explícito en los trabajos de éste último (¿veremos por estos lares Ken Park?)
Tracey, la protagonista, es una bellísima muchacha que acaba de ingresar a la secundaria. Compone junto a su madre –una mujer joven, liberal y ex-alcohólica- y su hermano una familia disfuncional que con apuros y conflictos varios se las arregla para salir adelante. El proceso de cambios que Tracey transita y las ansias de crecer en forma apresurada, la llevan a querer “pertenecer” a cierto grupo más desprejuiciado y popular comandado por la chica sexy del lugar: Evie. Esta no sólo se convertirá en su amiga inseparable, sino que se le instalará en su propia casa. Claro que todo esto tiene su precio y la otrora dulce y virginal Tracey conocerá un mundo nuevo donde las drogas, el sexo, el alcohol y el robo serán la moneda corriente. Su madre, debatiéndose entre la incredulidad y la comprensión, tratará de ayudarla y de reestablecer el nexo de su relación.
A pesar de que por lo expuesto se desprenda una moraleja de tono aleccionador –que lo tiene- el film no se resiente gracias al manejo de la novel directora Catherine Hardwicke del material que tiene entre manos y de una cámara inquieta que logra que el ritmo no decaiga en ningún momento. Ojo… no estamos hablando del vértigo de la estética MTV, sino de una narración sostenida que incluso regala algunas imágenes para el recuerdo (el primer “viaje” en el parque danzando a contraluz salpicados por el agua o la madre besando una por una las heridas de su hija).
El trío principal está compuesto por tres actrices estupendas y muy disímiles. 
Evan Rachel Wood (vista en Simone) es Tracey y tiene aquí su prueba de fuego. Su personaje posee varias aristas y la muy joven intérprete sale más que airosa, un nombre para tener muy en cuenta. Nikki Reed –también coguionista- asume a Evie con una soltura infrecuente en una actriz sin experiencia. Y finalmente Holly Hunter, la veterana del grupo, ofrece uno de esos trabajos que ponen la piel de gallina y no sería nada extraño que obtuviera una nominación para los próximos Oscars.
Si la imagen que usted tiene de una adolescente es la de una fan de Mambrú o de Bandana que se sienta todas las noches para ver Rebelde Way, esta es su película. Se va a llevar una gran sorpresa.
Título: A los trece.
Título Original: Thirteen.
Dirección: Catherine Hardwicke.
Intérpretes: Evan Rachel Wood, Holly Hunter, Nikki Reed, Jeremy Sisto, Deborah Kara Unger, Brady Corbet, Sarah Clarke y Jenicka Carey.
Género: Drama.
Clasificación: Apta mayores de 16 años.
Duración: 100 minutos.
Origen: EE.UU. / Reino Unido
Año de realización: 2003.
Distribuidora: Fox.
Fecha de Estreno: 13/11/2003.
Puntaje: 7 (siete)
