Por Juan Blanco
Fácil, el setenta por ciento del imaginario cultural de los norteamericanos tiene que ver con el cine (el otro treinta quedaría para la televisión y la música). Por ello, en los EEUU la industria cinematográfica siempre fue, y lo es aún hoy, una de las más grandes herramientas de propaganda. Y si bien este “fin último” del séptimo arte no se presta en todos los casos (hay tipos de cine e incluso artistas que suelen estar exentos de tal utilitarismo), es una realidad innegable. Así, de tanto en tanto surgen proyectos demasiado obvios y en circunstancias demasiado especiales que hacen del prejuicioso paradigma un auténtico canon. Uno de ellos es Brigada 49, la oda a los bomberos post-11 de Septiembre.
¿Cómo es que los bomberos buscan la manera de entrar en lugares en llamas mientras que el resto de la gente intenta huir de ellos? Esta es la pregunta explícita que corta al medio al film de Jay Russell, y la respuesta tiene que ver con el coraje y la vocación que éstos demuestran en su oficio y que no tiene comparación. Ese mismo que se cobró las vidas de aquellos servidores públicos dentro de las Torres Gemelas en el 2001. Ese mismo que hoy pretende fundamentar casi dos horas de golpes bajos en un relato de ficción en el que los bomberos no podrán pasarla peor ni sufrir de peor manera, y todo para poder vender su imagen al norteamericano medio que, hoy más que nunca, necesita creer que los héroes existen entre ellos. Y existen, llevan cascos y mangueras y dejan sus vidas entre esas llamas a cambio de otras. Esta es más o menos la idea que intenta traslucir Brigada 49, y que de alguna manera –muy trivial y excesiva- logrará transmitir hasta ofender al espectador o, en el mejor de los casos, convencerlo de anotarse en su escuela de bomberos regional.
La historia comienza con un complicado incendio que deja al bombero Jack Morrison (Joaquín Phoenix) atrapado solo entre los escombros. Y como bien se dice que antes de morir la vida entera pasa frente a los ojos, el bombero Jack hará un raconto de sus experiencias de vida, desde sus inicios en la fuerza hasta su actual desempeño profesional, pasando por sus amistades, su amor y familia. Así, la trama de Brigada 49 se construye con los sucesivos flashbacks de Morrison, los cuales se alternarán con su presente rescate hasta las instancias decisivas de la película, donde habrá que ver si el joven pero experimentado bombero logra salir con vida o no.
Si bien Brigada 49 goza de buen ritmo (no aburre para nada), de algunos buenos momentos desde lo estético (cortesía del director) y de correctas actuaciones (además de Phoenix también está John Travolta haciendo su buen trabajo de siempre), el resto del relato muere entre lo sentencioso y lo ingenuo del guión. Hay demasiado sufrimiento acumulado y demasiados malos trechos en las vidas y rutinas de los protagonistas; elementos que en algún punto transcienden las simples circunstancias para evidenciarse como un calculado mecanismo narrativo para “concientizar” al espectador. La idea de que los bomberos arriesgan su vida para salvar otras y que mueren intentándolo se cae de madura y no podría haberse expuesto de una manera menos sutil. Para videocable, un domingo de lluvia y en un TV de 14.
Título: Brigada 49.
Título Original: Ladder 49 .
Dirección: Jay Russell.
Intérpretes: Joaquin Phoenix, John Travolta, Jacinda Barrett, Morris Chestnut, Kevin Daniels, Robert Patrick, Kevin Chapman, Balthazar Getty, Jay Hernandez, Billy Burke.
Género: Drama, Acción.
Clasificación: Apta mayores de 13 años.
Duración: 115 minutos.
Origen: EE.UU.
Año de realización: 2004.
Distribuidora: Buena Vista.
Fecha de Estreno: 02/12/2004.
Puntaje: 4 (cuatro)