Se hizo rogar pero por fin llegó la película más pochoclera del año. Hace meses que se sabía de la existencia de Terror a bordo merced a un blog que los productores de New Line Cinema habían creado en internet para que una verdadera legión de fans de la clase B y del carismático Samuel L. Jackson puedan dejar sus sugerencias creativas (muchas de las cuales fueron incorporadas al guión en un gesto de interactividad sin precedentes). El cineasta original del proyecto era el chino Ronny Yu -que ya había trabajado con Jackson en Dinero sucio (The 51st State, también conocida como Formula 51, que aquí se editó directamente en video sin pasar por las salas de cine)- pero por diferencias de criterio con la producción no aceptó el encargo y entonces fue contratado el ex especialista en dobles David R. Ellis quien tiene en su haber dos filmes tan divertidos como Destino final 2 y Celular. Cuenta la leyenda que Jackson aceptó el papel sólo por el título y por la entonces asegurada presencia de Yu en el sillón del director. Toleró el enroque de Ellis por Yu sin problemas… pero amenazó con renunciar cuando empezaron a circular con insistencia los rumores de que Snakes on a plane iba a cambiar de denominación. Increíble.
De todos los animales no hay ninguno que supere como villano al tiburón y a las serpientes. En lo personal soy un absoluto fóbico de los ofidios y no me cuesta mucho asustarme aunque los que padezcan sean otros. Porque vaya si padecen los personajes de Terror a bordo. La idea es simple y retorcida como la mente de un enfermo de delirium tremens. El agente del FBI Neville Flynn (Jackson) escolta al joven Sean (el australiano Nathan Phillips) en un vuelo Hawai- Los Angeles. Sean debe presentarse en un Tribunal para atestiguar en contra del mafioso Eddie Kim (Byron Lawson) quien para evitarlo hace ingresar al avión una caja llena de las víboras más venenosas y peligrosas del planeta. Para asegurarse de que las bichas cumplan con su tarea rocían los collares de flores que les ofrendan a los pasajeros en el aeropuerto con feromonas (aromas químicos que execran las hembras cuando están en celo que enloquecen a los machos). Un absurdo diabólico que se vuelve una gozosa fiesta extra cinematográfica cuando los reptiles son liberados y atacan a la gente en sus partes pudendas (se advierte al público que hay escenas de zoofilia… pero no propiciadas por los humanos) y en las otras también.
Para disfrutar de un producto tan especial como esta Terror a bordo es indispensable poseer un amplio sentido del humor que ayude a aceptar, entre muchos otros desvaríos, la presencia en el avión de una pitón de siete metros de longitud que en una escena horripilante se fagocita a un personaje bastante antipático. Por su parte, David R. Ellis hizo su tarea con la mayor seriedad, más allá de lo bizarro que sea el contenido del guión, y puso unos cuantos golpes de efecto que en un 99,9% de los casos consisten en una serpiente atacando hacia cámara. Por raro que parezca funcionan todos (el mejor de ellos supera en mi ranking a uno muy ingenioso pergeñado por Spielberg en Jurassic Park: El mundo perdido) y por ende la combinación de sustos + risas trabaja a pleno alternándose con éxito durante los cien minutos de película.
La memorable frase de Samuel Jackson “I have had it with these motherfucking snakes on this motherfucking plane!” disparó a Terror a bordo a la categoría de culto… pero no, la cosa no se termina ahí. Los que tengan el placer de escuchar la banda de sonido en casa podrán recordar los diálogos más inverosímiles sampleados en algunas gloriosas canciones pop que, dicho sea de paso, fueron compuestas por músicos internautas convocados por el blog de la New Line Cinema.
El corolario más obvio: una película hecha por el público y para el público. Honestidad comercial pura. Auténtica democracia cinéfila.
Título: Terror a bordo.
Título Original: Snakes on a plane.
Dirección: David R. Ellis.
Intérpretes: Samuel L. Jackson, Nathan Phillips, Rachel Blanchard, Byron Lawson, Julianna Margulies, Bobby Cannavale, Elsa Pataky, Taylor Kitsch y Lin Shaye.
Género: Acción, Thriller bizarro.
Clasificación: Apta mayores de 16 años con reservas.
Duración: 105 minutos.
Origen: EE.UU./ Alemania
Año de realización: 2006.
Distribuidora: Distribution Company.
Fecha de Estreno: 14/09/2006.
Puntaje: 7 (siete)