Por Pablo E. Arahuete
Si hay algo que destaca a Gracias por fumar del resto de lo que podría enrolarse en el rubro de comedias políticamente incorrectas, que buscan meter el dedo en la llaga sabiendo de antemano que el cine no puede cambiar el mundo, es precisamente su despojo de toda buena intención o moralina barata. Y ese desparpajo corrosivo es lo que permite, 
por ejemplo, que su protagonista nos resulte menos miserable de lo que debería ser y su antagonista un patético hipócrita.
Sin embargo, lo más interesante de esta ópera prima de Jason Reitman (hijo de Ivan Reitman, aquel de Los cazafantasmas), también responsable del guion, reside en su coherencia, tanto en lo narrativo como en su historia. El primer indicio de coherencia lo marca el valor de la palabra y el meticuloso juego de diálogos filosos y brillantes en un contrapunto veloz que remata las situaciones sin necesidad de agregar una línea o acción. Como las comedias de la época dorada de Hawks o Wilder, el ritmo de los diálogos no decae y dosifica la acción, sumado a una caracterización de personajes bien definidos en roles y actitud sin una pizca de pureza.
Aunque a veces haya excesos en el uso de la voz en off es perfectamente admisible que el protagonista se la pase hablando. Hablar, persuadir, manipular y mentir forman parte de la naturaleza de Nick Naylor (impecable Aaron Eckhart), un exitoso portavoz de las tabacaleras, quien se jacta frente a sus colegas -un lobbysta de las armas (David Koechner) y una mujer que hace lo suyo para las bebidas alcohólicas (María Bello)- de que las estadísticas de mortalidad por tabaquismo lo ubican al tope de la lista y hará lo imposible por seguir haciendo bien su trabajo. ¿Qué significa hacer bien su trabajo? Haber logrado instaurar el consumo del cigarrillo entre los chicos y adolescentes y, ahora su mayor desafío conseguir que Hollywood vuelva a insertar el hábito de fumar desde su star system como otrora con sus actores y actrices del momento.
Nada parece conspirar en contra de Nick para cantar victoria, salvo una sexy periodista (Katie Holmes) quien bajo el pretexto de conocerlo a fondo expondrá sus máscaras y
secretos o un senador anti-tabacalero que se desvivirá por llevarlo al banquillo de los acusados (William H. Macy).
Reitman sabe que la mejor manera de exponer los problemas y criticar la estupidización de una sociedad que vive aterrada de consecuencias sin preguntarse las causas es a través del humor y el cinismo, un puente para quien quiera reflexionar. Y reflexionar implica no dar recetas de sentimentalismo convirtiendo a sus personajes en hombres que buscan la redención o restaurar los valores tradicionales. En eso el clímax de este film -que no conviene adelantar- es contundente.
El arrollador carisma de Aaron Eckhart y la buena selección de actores secundarios hacen el resto para que el círculo cierre y supere por varios cuerpos a la media de comedias de los últimos años.
Un hallazgo en tiempos donde las buenas películas son tan difíciles de hallar como un lugar donde reine el aire puro.
Título: Gracias por fumar.
Título Original: Thank You for Smoking.
Dirección: Jason Reitman.
Intérpretes: Aaron Eckhart, Maria Bello, Cameron Bright, Adam Brody, Sam Elliott, Katie Holmes, David Koechner, William H. Macy, J.K. Simmons, Robert Duvall, Kim Dickens, Rob Lowe, Todd Louiso y Melora Hardin.
Género: Comedia, Drama.
Clasificación: Apta mayores de 13 años.
Duración: 92 minutos.
Origen: EE.UU.
Año de realización: 2005.
Distribuidora: Fox.
Fecha de Estreno: 26/10/2006.
Puntaje: 8 (ocho)
