Por Pablo E. Arahuete
El debut de Leonor Benedetto como realizadora y guionista no sólo recupera ciertos vicios y problemas de criterio de un cine argentino soso y por fortuna caduco, sino que demuestra que cuando un elenco prometedor no está bien dirigido aparece la sobreactuación y el resultado deja bastante que desear.
Si Federico Luppi extrapola su profesor progre de Lugares Comunes y debe lidiar con un grupito de alumnos fascistas, quienes le escriben cosas feas en la entrada de su casa y cuya frase célebre es “Extraño las utopías”, estamos en problemas; si Gustavo Garzón se pone el mameluco de artista que construye objetos con vidrio, entre ellos caleidoscopios, tipo sensible que apuesta a los sueños y al amor de Gabriela Toscano, hija de Luppi y esposa golpeada por un marido alcohólico y desocupado (Rafael Ferro), cuyo trágico destino se advierte desde el instante en que emite una frase, el cuadro se agrava; y si a todo eso le agregamos un videasta aficionado que parece sordo porque habla a los gritos (Julio Suárez), un médico sin pacientes (Luis Luque) casado con una rubia tarada, verborrágica y aburrida (Jesica Schultz), quien lo cree exitoso y se obsesiona por sacar un crédito para adquirir la casa soñada, una censista de abrumadora superficialidad (María Carámbula), un barman y pizzero joven a punto de casarse (Pablo Rago) quien cae en la tentación de una bailarina de tango pelirroja (Alejandra Radano), y como frutilla de este postre edulcorado la presencia casi espectral de una mujer oscura y sentenciosa (la española Elvira Minguez), estamos hundidos.
Todos estos retazos de personajes, extraídos de cualquier tira televisiva que bordean el trazo caricaturesco y no escapan del estereotipo atraviesan historias que no superan el nivel anecdótico.
La actriz de Rosa de lejos organiza gran parte del relato en un bar: “El buen destino” (de ahí el título), regenteado por Oscar Alegre, donde los personajes escupen sus angustias y se contienen con un compendio de frases hechas. A este fallido recurso se le deben sumar la autorreferencialidad a la crisis socio-económica de los últimos tiempos como también la introducción de un punto de vista omnipresente -¿la mirada de Dios, tal vez?- con el fin de establecer un nexo entre lo micro y lo macro. Ni en una dimensión ni en la otra, la ópera prima de Benedetto consigue traspasar el muro de la mediocridad (tampoco con la ayuda financiera del Gobierno de San Luis), acumulando clichés y falta de criterio cinematográfico y narrativo.
Título: El buen destino.
Título Original: Idem.
Dirección: Leonor Benedetto.
Intérpretes: Federico Luppi, Gustavo Garzon, Gabriela Toscano, Pablo Rago, Jorge Suárez, Luis Luque, Oscar Alegre, María Carámbula, Jessica Schultz, Roberto Vallejos, Alejandra Radano, Fabiana García Lago, Nicolás Vázquez, Rafael Ferro, Norma Aleandro, Luis Ziembrowski y Juan Leyrado.
Género: Drama.
Clasificación: Apta mayores de 13 años.
Duración: 111 minutos.
Origen: Argentina/ España.
Año de realización: 2005.
Distribuidora: No disponible.
Fecha de Estreno: 30/11/2006.
Puntaje: 3 (tres)