Por Luis Pietragalla
Helen Mirren no actúa en esta película, sino que es Isabel II quien lo hace. Raras veces se ve la simultaneidad de una gran actuación con una caracterización que hace olvidar que estamos ante un intérprete. Michael Sheen compone (muy bien) a Tony Blair, pero no son dos gotas de agua, al igual que Alex Jennings, el actor que hace príncipe Charles; en ambos casos, sus brillantes desempeños hacen olvidar que no son idénticos a personajes tan bien conocidos. Los rostros de la reina Margarita (la grácil estrella de los 50 Sylvia Syms), Felipe de Edimburgo (James Cromwell) y Cherie, la esposa de Blair (Helen MCrory) son poco conocidos tienen para gran parte del público (salvo el inglés, claro), por lo que su falta o no de parecido físico pasa desapercibida. ¡Milagros de la ficción y de la tan mentada ‘suspensión de la incredulidad’, que hace que pasemos por alto esas diferencias!
Aunque, claro está, no hay tales milagros, sino respaldos como la solidez de un guión como el de Peter Morgan, que suavemente va describiendo la historia de una relación (la reina y el primer ministro), que tiene cambios sustantivos porque provoca en ella una crisis (británica, por supuesto) y en él, tal vez, un cambio de mirada.
Stephen Frears logra una pieza maestra (¿o casi?), donde la mirada no es ni frívola ni escandalosa (la figura de Isabel II sale fortalecida de este filme), pero sí intimista. La ficción, con su imprescindible cuota de verosimilitud, logra que penetremos en los mundos privados de estos personajes tan públicos como mediáticos. Su dirección pone de manifiesto la adoración de un pueblo por una cáscara, que le cuesta mucho dinero, pero de la que no estaría dispuesto a desprenderse por su fuerte poder simbólico.
No hay crítica simplista, pero tampoco complacencia; no se los denuesta, pero la adulación nunca aparece. La paradoja británica se muestra clara y sobriamente; la veneración convive con el disfrute de la contemplación de los de la Familia Real, como una necesidad religiosa (el culto a las celebrities, en este caso). La escena del acercamiento de Isabel II a su pueblo es clave.
Rara, entretenida, inteligente y cautivante película.
Título: La Reina.
Título Original: The Queen.
Dirección: Stephen Frears.
Intérpretes: Helen Mirren, James Cromwell, Michael Sheen, Alex Jennings, Sylvia Syms, Roger Allam, Laurence Burg y Tim McMullan.
Género: Biografía, Drama histórico.
Clasificación: Apta todo público.
Duración: 97 minutos.
Origen: Reino Unido/ EE.UU./ Francia/ Italia.
Año de realización: 2006.
Distribuidora: Distribution Company.
Fecha de Estreno: 22/02/2007.
Puntaje: 9 (nueve)
