Por Pablo E. Arahuete
Ni Cielo ni Infierno, sino más bien una especie de Purgatorio deliberadamente construido en el interior de una inmobiliaria o en la barra de un bar en un hotel parisino. A sus 85 saludables años y con 17 obras que trazan una filmografía personal, ecléctica y cambiante, el realizador Alain Resnais vuelve al ruedo con un film menos diáfano y esperanzador que Conozco la canción, su último opus estrenado comercialmente.
Si hay algo que puede destacarse en Corazones, un escalón por debajo de otras de sus películas, es la vitalidad y frescura con que el director francés presenta una trama atravesada por planteos morales pero humanos por naturaleza: el amor, el desamor, la culpa, el deseo, el equívoco de las apariencias, la soledad. Estos hilos se van hilvanando con puntada fina, pausada en un relato que adopta en iguales proporciones una tonalidad de matices que pasa de la ironía a una pseudo- melancolía, donde la agudeza de Resnais permanece intacta. Entregado conscientemente al artificio y a la distancia emocional que permite lo teatral, el creador de Mélo vuelve a confiar en una pieza del dramaturgo británico Alan Ayckbourn, de quien ya había adaptado otra obra con anterioridad en su famoso díptico Smoking/No smoking.
De la brumosa Londres a la nevada París, las rupturas y los encuentros fortuitos no cambian. Tampoco la desolación que a simple vista parece unir a este sexteto de personajes entrelazados por la descarada ironía del destino. Thierry (André Dussollier) trabaja junto a Charlotte (Sabine Azéma) en una agencia inmobiliaria y vive con su hermana menor Gaelle (Isabelle Carré), con quien por tradición ahogan la melancolía dominguera en vibrantes partidos de Ludo. Si no es el Ludo, el pretexto será la televisión o esas inconducentes rondas inmobiliarias que buscan convencer a clientes molestos, como Nicole (Laura Morante), a invertir en un nuevo departamento. Pero Nicole en realidad está harta de su pareja Dan (Lambert Wilson), ex-militar que fue separado de la Fuerza deshonrosamente, frecuente bebedor que el paciente Lionel (Pierre Arditti) debe escuchar en la barra de su bar. Almas grises, solitarias que se rozan en un puñado de situaciones marcadas por una sutil carga de sentimentalismo sin estancarse en lo cursi y con un gran reparto que, dirigido por este coloso del cine, enriquece mucho más la historia.
En Corazones no es tanto lo que se ve o descubre en primer plano lo verdaderamente atractivo, es decir lo aparente, sino todo aquello que se oculta tras los rostros, los silencios, las poses y los fuera de campo tan importantes en el relato. Pequeños fragmentos de la vida que caen como un copo de nieve y se desintegran en la imposibilidad de que la felicidad dure eternamente.
Título: Corazones.
Título Original: Coeurs.
Dirección: Alain Resnais.
Intérpretes: Lambert Wilson, Sabine Azéma, André Dussollier, Laura Morante, Pierre Arditi, Isabelle Carré.
Género: Drama, Romance.
Clasificación: Apta mayores de 13 años.
Duración: 120 minutos.
Origen: Francia/ Italia.
Año de realización: 2006.
Distribuidora: Distribution Company.
Fecha de Estreno: 02/08/2007.
Puntaje: 8 (ocho)