Por Emiliano Fernández
El realizador estadounidense Neil LaBute continúa con problemas y no consigue rescatar del medio pelo a su última película, la monótona Vecinos en la mira (Lakeview Terrace, 2008). Este drama social con cierta compulsión al thriller suburbano pone el acento en la tormentosa relación entre una pareja interracial, recién mudada a un exclusivo barrio de Los Ángeles, y su psicótico vecino, un agente de policía negro, paranoico y extremadamente racista. El hombre les hará saber que desaprueba la unión y desea que se vayan del lugar. Distintas formas de acoso e intimidación llegarán de inmediato, sin mucho preámbulo…
Como las pobres victimas tenemos a Kerry Washington y Patrick Wilson, el pederasta ajusticiado de Hard Candy (2005). Ahora bien, parece que LaBute es un poco lento para aprender de los errores pasados y vuelve a dar el rol central a un intérprete que gusta de la sobreactuación y el eterno repetirse. ¿Qué se le va a hacer? Samuel L. Jackson personifica al loquito de turno, un “señor de azul” que todo lo resuelve levantando la voz y metiendo una escopeta en la quijada de cualquiera que se cruce en su camino. Al igual que Nicolas Cage en la floja El culto siniestro (The Wicker Man, 2006), el tipo no sabe contenerse…
A pesar de las limitaciones apuntadas, el desempeño del elenco es relativamente correcto. Los principales inconvenientes están condensados en el poco inspirado guion de David Loughery y Howard Korder. El tono moralizante genera cansancio, falta desarrollo de personajes, numerosas escenas no conducen a nada y el film en conjunto remite a El inquilino (Pacific Heights, 1990) de John Schlesinger, una obra interesante aunque muy alejada de los mejores trabajos del inglés. En especial queda sin explicitar la motivación última de los protagonistas, lo que implica indecisiones tediosas por parte del relato…
La propuesta se perfila repetitiva desde el inicio y a fin de cuentas carece de ideas frescas que aporten alguna clase de novedad en lo que respecta al viejo tópico de la violencia subyacente al odio metropolitano. De hecho, Vecinos en la mira amenaza constantemente con explotar cual combo testimonial a lo Spike Lee o por lo menos despegar en tanto historia de suspenso psicológico. Pero la película no cumple con ninguna de las dos promesas y deja un sabor amargo en el espectador. La narración es tan rutinaria que uno se termina preguntando si no hubiera sido mejor dinamizar el conflicto esencial obviando un racismo mal trabajado y remarcando el solipsismo característico de las grandes urbes…
Título: Vecinos en la mira.
Título original: Lakeview Terrace.
Dirección: Neil LaBute.
Intérpretes: Samuel L. Jackson, Patrick Wilson, Kerry Washington, Jay Hernandez, Justin Chambers, Ron Glass, Regine Nehy, Keith Loneker, Jaishon Fisher y Robert Pine.
Género: Thriller, Drama.
Calificación: Apta mayores de 13 años, con reservas.
Duración: 110 minutos.
Origen: EE.UU.
Año de realización: 2008.
Distribuidora: UIP – Sony.
Fecha de estreno: 16/10/2008.
Puntaje: 3 (tres)