En la vida de todo actor “serio” siempre hay algún proyecto que se acepta exclusivamente por motivos económicos. En Hollywood es muy común que esto suceda con toda una generación de intérpretes que alguna vez fue prestigiosa (De Niro, Pacino, Nicholson, Hoffman, etc.) y en la actualidad se dedica a dilapidar todos los laureles conseguidos con 
productos comerciales impersonales. Si bien están lejos de esos monstruos en cantidad y calidad de películas, dos destacados actores como el escocés Ewan McGregor y el australiano Hugh Jackman acaban de traspasar el fatídico punto de no retorno con el vomitivo thriller El engaño. En el caso de Jackman, con el agravante de que se trata de su primera incursión en la producción. Razón de más para presentar cargos en su contra por darle luz verde a uno de los peores guiones de la historia del cine firmado por Mark Bomback (hubiese usado un pseudónimo para no quemarse) y filmado con una torpeza imperdonable por el novel director Marcel Langenegger.
Cuesta creer que un libreto tan inconsistente como el de Bomback no haya sido sujeto de innumerables revisiones tal como es costumbre en la industria (¿o acaso, por el contrario, quedó así debido a tantos cambios extemporáneos?). Lo cierto es que la trama ya desde el primer acto ofrece una sarta de obviedades impresentables que llaman la atención hasta del menos entrenado de los espectadores. Con el transcurrir de los minutos en lugar de mejorar la cosa va empeorando cada vez más hasta arribar a un clímax absolutamente inverosímil y absurdo, que sería un festival de humor involuntario de no mediar el carísimo precio de la entrada.
Ni siquiera la presencia de un elenco femenino de lujo logra levantar la puntería de este tosco relato de suspenso sin tensión ni interés genuino. Nunca antes en una película Michelle Williams, Natasha Henstridge y la exótica Maggie Q lucieron tan poco fotogénicas como aquí. Esta vez el excelso director de fotografía Dante Spinotti fue incapaz de realzar la belleza de semejantes damas, para concentrarse en iluminar sin gran esmero algunos exteriores nocturnos de la ciudad de Nueva York. Un final rodado en Madrid tampoco aporta demasiado desde lo estético dejando así en evidencia un desgano profesional inusual en el italiano. Se nota que perdió el entusiasmo al leer el guion. Huelga decir que no hay plata que subsane esa pérdida…
Ewan McGregor interpreta a un contador que es convocado para auditar los libros de una
empresa multinacional en la que conoce al abogado marrullero que compone Hugh Jackman (por cierto, con bastante menos convicción que su co-protagonista). Michelle Williams es la rubia tentación que se le cruza en el camino al tímido contador que, una vez flechado por Cupido, caerá irremediablemente en una trampa cuyo fin se cae de maduro prácticamente desde que nos enteramos de la profesión de nuestro héroe. Entre tantas féminas conocidas, sorprende y causa gracia el brevísimo papel de la veterana Charlotte Rampling (quien esta semana también integra el elenco de La duquesa). Un 2008 fecundo para la inglesa dado que además la vimos en De amor y desencuentro y Misión Babilonia.
Los giros “inesperados” del guion de El engaño se anticipan tanto que más de uno dirá: “Yo puedo escribir algo superior”. Lástima que, como sostiene la autora Linda Seger en su introducción a “Making a good script great”, “Cualquiera puede escribir mejor; el truco está en escribir algo de forma tan extraordinaria que, después de que todo el mundo lo destroce con las revisiones, aún quede algo digno en pie”. Puedo asegurar que cualquier escritor neófito saldrá de la sala creyéndose la viva reencarnación de William Faulkner y Ernest Hemingway juntos. En conclusión: ¡Vade retro, Satanás!
Título: El engaño.
Título original: Deception.
Dirección: Marcel Langenegger.
Intérpretes: Hugh Jackman, Ewan McGregor, Michelle Williams, Maggie Q, Natasha Henstridge, Lynn Cohen, Malcolm Goodwin, Charlotte Rampling, Bill Camp.
Género: Crimen, Drama, Thriller.
Calificación: Apta mayores de 16 años, con reservas.
Duración: 107 minutos.
Origen: EE.UU.
Año de realización: 2008.
Distribuidora: Alfa Films.
Fecha de estreno: 11/12/2008.
Puntaje: 1 (uno)
El staff opinó:
–Un guion tan inconsistente como cualquier discurso de los K. Hugh Jackman como productor es un gran actor y Ewan McGregor con esa cara de yo no fui confirma que en Hollywood hasta el más vivo cae en la trampa de los dólares fáciles.– Pablo E. Arahuete (1 punto)
–Este thriller erótico da vergüenza ajena. La trama está repleta de clichés y el desarrollo es en verdad patético. Nunca sabremos cómo fue que Hugh Jackman y Ewan McGregor terminaron mezclados en esto…– Emiliano Fernández (2 puntos)
