Por Pablo Arahuete
Si las buenas ideas no tienen quien las ejecute desde la producción quedan en un papel o en una computadora archivadas. Joana D’Alessio apostó a Ultimatum, reunió a un equipo talentoso y concretó la difícil amalgama entre producto de calidad y espacio de difusión. En esta entrevista exclusiva nos enteramos un poco más acerca de la producción de esta nueva serie que se emitirá por la TV Pública.
P.E.A.: – ¿Cuál fue el mayor desafío para encarar un proyecto que tiene mucho que ver con la sitcom y su modelo de producción acotado por la realidad argentina?
Joana D’Alessio: -La sitcom tradicional se caracteriza por suceder en pocos decorados, y si bien Ultimatum no es una sitcom tradicional, tratamos de mantener lo más acotado posible el tema decorados-locaciones. La apuesta fue tener buenos libros y conseguir buenos actores. Luego, el 80% de la serie se rodó en la casa principal y tuvimos unos días en otras locaciones. Igualmente, no fue fácil porque era un presupuesto restringido y teníamos muchas ambiciones, pero creo que la apuesta funcionó muy bien.
P.E.A.: – ¿Cómo trabajaste con el director y el guionista?
Joana D’Alessio: – El guionista, Andrés Rapoport, es amigo mío hace 26 años (quizás preferiría no haber hecho la cuenta…). Ambos estudiamos en el ENERC y pasamos años diciendo “tenemos que hacer algo juntos”. Teníamos una idea para un largometraje inspirada en “hechos reales” (o mejor dicho en escenas insólitas de la vida conyugal post-hijos), y cuando vimos el llamado a concurso, a Andrés se le ocurrió transformar esa idea en una serie y así surgió Ultimatum. Luego, él formó un equipo de colaboradores y se hizo un trabajo muy interesante y minucioso de idear las sinopsis paso a paso y las escaletas de cada capítulo hasta que estuvieran fuertes y pasar a los libros. En ese proceso hacíamos reuniones donde yo insistía con algunas ideas que tenía de los personajes. Los chicos habían armado un panel gigante donde estaba todo planteado como un gran rompecabezas. Fue un proceso espectacular, muy divertido y fructífero. De ese trabajo con las escaletas se pasó a los guiones, que se escribieron en duplas, y finalmente pasaron todos por la mano de Rapo. Fue un esquema que él propuso y fluyó.
El director, Jorge Bechara, se involucró al 100%. Con él trabajamos los guiones, los revisó a todos en cuanto a lo dramático y lo técnico, juntos pensamos el casting, buscamos las locaciones y también se involucró en la edición de todos los capítulos.
Se hizo un trabajo muy intensivo y creativo de reproducción que nos permitió llegar al rodaje con las cosas muy aceitadas. Bechara tiene una experiencia increíble y en el set va a la velocidad del rayo, no para un segundo. El equipo técnico también lo confirmamos de común acuerdo, combinando gente proveniente del cine, con experimentados en televisión. La verdad es que tuve mucha suerte, porque para mí fue la primera experiencia en una serie de ficción de estas características y trabajé con gente de mucha experiencia.
P.E.A.: – ¿Cuál fue el criterio para convocar el casting?
Joana D’Alessio: – El criterio fue muy simple: que los dos protagonistas fueran buenos actores y con nombre. Fernán Mirás y Julieta Cardinali son claramente dos actores con prestigio, tienen una carrera, un recorrido, son buenos y versátiles y que todos sabemos quiénes son cuando los nombramos, vemos sus caras. Para mí eso era fundamental, porque no sabía qué iba a pasar con la serie. Tener un poco de cartel ya le daba otro color a su posible llegada al público, que para mí como productora, es la instancia clave de todo el proceso. No me interesa hacer cosas geniales que no se ven, quiero hacer cosas geniales que sean vistas por mucha gente. Hace muchos años, cuando arranqué la productora (NdeR: Bastiana Films), mi primera meta fue la calidad y ahora pienso también en el público, y los actores son muy importantes en ese sentido. Fernán siempre me pareció un gran actor, recuerdo algunas cosas que hizo en tele donde me sorprendía mucho su calidad actoral, y Julieta me parecía siempre, además de muy buena actriz, una mina con mucha personalidad, además diseñadora y divertida, alguien que tiene una fuerza y una luz especiales. También, tuve la gracia de descubrir que son dos personas con un gran sentido del humor y que se parecen bastante a los personajes que habíamos escrito, eso fue genial. Al resto del elenco, lo armamos en base a actores que ya conocíamos o nos gustaban y para los niños hicimos un casting dirigido por Pablo Ini y Mora Recalde, siempre en conjunto con Bechara.
P.E.A.: – ¿En cuánto facilitó el hecho de grabar en dos locaciones, teniendo en cuenta los plazos del rodaje?
Joana D’Alessio: – Fue LA CLAVE para poder filmar. En una locación cinco semanas y en la otra tres días, con dos días de exteriores: sin ese plan, no hubiera habido serie.