El actor argentino Ricardo Darin ha sido el gran protagonista de la jornada previa a la celebración de los III Premios Platino. En la gala de este domingo 24 de julio recibirá el Platino de Honor por una trayectoria que lo ha convertido en un referente del cine iberoamericano, un talento que ha traspasado fronteras y conquistado al público de todo el mundo.
Los galardones que nacieron con el objetivo de aunar a toda la industria iberoamericana y buscan facilitar el intercambio cultural entre las diversas cinematografías, abogan por superar las dificultades de distribución. “Estábamos acostumbrados a tener un intercambio más fluido del que tenemos hoy en día” reflexionaba Ricardo Darin, al mismo tiempo que planteaba la necesidad de que cada espectador se pregunte a si mismo hasta qué punto quieren seguir disfrutando de historias surgidas de sus propias vivencias culturales; para él la respuesta es clara: “me encantaría seguir disfrutando de nuestras cinematografías”.
Darin, que destaca por su versatilidad interpretativa y su talento innato, se siente en un sueño al recibir este reconocimiento; además no duda en apuntar que durante toda su vida y trayectoria profesional ha sido “una de las personas más afortunadas que he conocido”.
Con una filmografía que atesora joyas como El Secreto de sus Ojos, El hijo de la novia, Nueve Reinas o Elefante Blanco, que le ha valido más de medio centenar de reconocimientos en festivales internacionales y galardones de gran relevancia a nivel mundial, tal es el caso del Premio Goya al mejor actor o la Concha de Oro del Festival de San Sebastián, ambos por Truman, película que aspira a 5 Premios Platino. Darin es capaz de relativizar y “no medir las cosas en éxito/fracaso, trato de no dejarme impresionar por las grandilocuencias… en el cine vamos aprendiendo en el camino”.
El actor de Relatos Salvajes, película triunfadora de estos premios el pasado año, declara su amor por el séptimo arte: “el cine nos ayuda a vivir mejor, hay historias que nos ayudan a caminar, que generan esa sensación maravillosa que sentimos al salir de la sala, que en lugar de aplastarnos nos eleva”. Un cúmulo de sentimientos y emociones que para Darin, si se comparten con el público, es la seña irrefutable de que se va por el buen camino.
Proveniente de una familia dedicada al séptimo arte, Darin empezó con 10 años y comparaba sus inicios con los de un niño criado en el ámbito circense y que un día las circunstancias le llevan a mostrar ante el público todo lo que ha estado viendo en su hogar desde su nacimiento; “No tuve muchas alternativas”, afirmaba con una sonrisa en el rostro. Pese a que en algún momento llegó a fantasear con ser psiquiatra, siempre sintió dentro esa pasión. Pero si hay algo que le hace más feliz aún a todos los niveles, es “ser un eslabón más de este cadena, ver que mi hijo está abrazando este camino… ver que la historia continúa”.
Un momento clave en su carrera se produjo en 1993 con Perdido por perdido de Alberto Lecchi. Un director que le mostró cómo funcionan las cosas detrás de las cámaras a todos los niveles, incluso ver como los propios actores pierden energía entre toma y toma. Un hecho que le permitió ver su trabajo “desde otra óptica, sentí que podía hacer que las cosas fuesen mejor y que eso mejoraba la relación con el equipo”.
El Premio supone un reconocimiento a su filmografía pero también un aliciente para los próximos proyectos como el nuevo trabajo del realizador argentino Santiago Mitre (El Estudiante, La Patota), La Cordillera narra una historia que toma una cumbre latinoamericano para mostrar lo que son las entrañas del poder.
Ricardo Darin es el tercer intérprete tras Sonia Braga, en 2014, y Antonio Banderas, en
2015, en ser reconocido con el Premio de Honor de los Premios Platino del Cine Iberoamericano, unos galardones que se celebrarán el próximo 24 de julio en el Centro de Convenciones de Punta del Este, Uruguay, y que según el propio actor “ponen en valor algo que venía ocurriendo desde hace mucho tiempo pero que era necesario sacar a la superficie, los lazos de nuestro cine son muy fuertes”.
Ixcanul, Penélope Cruz y Ricardo Darin Premios Platino del público
Darín fue doble protagonista al llevarse el Premio del Público por su interpretación en Truman. El premio a la mejor actriz fue a parar a Penélope Cruz, por su interpretación en Ma Ma, papel por el que también aspiró a los Premios José María Forqué. El productor de la cinta (junto a la propia Cruz), Alvaro Longoría, pudo trasmitir el agradecimiento de la interprete española destinado a todas las mujeres que le ayudaron a preparar este papel cargado de sentimiento.
Por último, estos galardones votados por el público y patrocinados por Iberia, destacaron a Ixcanul como mejor película, su director Jayro Bustamante quiso poner el foco de atención en el momento actual que vive el cine guatemalteco, donde su propia obra se erige como estandarte y aspira a un total de 8 Premios Platino, todo un record para los galardones y un éxito ya para esta obra rodada gracias al esfuerzo y trabajo del equipo en cafetales volcánicos del país sudamericano.
Los Platino son los primeros premios cinematográficos que engloban a toda industria audiovisu al iberoamericana: 23 países unidos en un proyecto común. Organizados por EGEDA, con la FIPCA, nacieron en 2014 con la clara intención de convertirse en uno de los más importantes instrumentos de fomento y apoyo a la cinematografía iberoamericana.