Por Pablo Arahuete
Si se pensara que el realismo mágico puede volcarse al lenguaje cinematográfico debería tenerse presente este film de Marcos Loayza, Averno, su estructura narrativa no escapa a lo clásico pero su libertad y riesgo para desdibujar y reconstruir un universo en las calles de La paz, Bolivia, lo acerca por un lado a la estética del cómic con personajes variopintos que se cruzan en el camino del héroe. El mito, la religión y la superstición en un perfecto collage explota cuando la acción del relato elige como espejo el descenso simbólico a los infiernos, con sus niveles de peligrosidad para el protagonista, que tiene la misión de buscar a su tío en una suerte de inframundo, no sucumbir ante las tentaciones que atraviesan su travesía nocturna ni tampoco beber esos elixires que ocultan venenos. De golpe, coreografías de peleas muy ligadas al cine clase B de artes marciales y también de repente algunas alusiones a mitos autóctonos para en definitiva trazar las coordenadas de un film iniciático desde el punto de vista del héroe, un joven lustrabotas. Un film alegórico, que desnuda los infiernos terrenales y por último una historia que apuesta a la diversidad sin estancarse en las veleidades del exotismo cinematográfico tantas veces aplaudido en festivales europeos.
Funciones:
20 de Abril – 21:20hs
Village Caballito