Por Pablo Arahuete
Entre lo personal, los miedos y la duda, la directora Marina Zeising utiliza el recurso audiovisual para una operación de catarsis compartida, que encuentra en otros discursos anexos algunas reflexiones interesantes sobre el rol de la mujer empoderada contra el patriarcado para abordar tópicos relacionados con los hábitos y los prejuicios que giran en torno a la maternidad o al no deseo de ser madre.
El viaje conecta con lugares, todos ellos anclados al discurso de una voz en off que se desenvuelve en la búsqueda poética y se impregna de aromas extraños cuando llegan las historias y las experiencias de mujeres, para que la propia directora indague sobre su propio deseo de convertirse en madre.
Para ese espacio de reflexión, Noruega no sólo la enlaza con su propia historia y orígenes sino con un proyecto de país diametralmente opuesto a la Argentina pese a las conquistas recientes de derechos de mujeres, a las marchas a favor del aborto legal y gratuito y otras inquietudes que amplían el espectro de la maternidad, su representación desde el arte y la correspondencia con los nuevos tiempos, donde el feminismo gana espacios en la cultura.
La lupa entonces es doble: la de enfocar en un primer plano lo maternal y a la distancia la de aquella mítica loba que alimentaba hijos extraños, sin preguntarse por lo biológico y siempre en consonancia con el instinto de prolongar la vida.
Título: La Lupa.
Título Original: Idem.
Dirección: Marina Zeising.
Género: Documental.
Clasificación: Apta mayores de 13 años.
Duración: 88 minutos.
Origen: Argentina.
Año de realización: 2018.
Distribuidora: Independiente.
Fecha de Estreno: 02/05/2019.
Puntaje: 5 (cinco)