Por Pablo Arahuete
Resulta interesante en esta propuesta de Matteo Garrone sumergirse en el mundo del protagonista. En los papeles, un hombre sencillo y “buenudo”, cuya afinidad con los canes se describe desde un vínculo completamente empático mientras que su némesis es todo lo contrario y el operativo empatía se disuelve por completo al ser artifice de innumerables humillaciones para con el protagonista.
Sin embargo en esta relación tóxica hay una necesidad compartida y desde ese lugar, sin proponerse juzgar las acciones de estos dos personajes, el director saca a relucir su capacidad para comenzar a teñir de mayor complejidad una trama que parecía demasiado jugada a lo binario.
Desde ese lugar y sin avanzar en la trama, podemos decir que Dogman apela al recurso de intercambio de roles, reformula la idea de domesticación humana a la par de manipulación para tensar los resortes del thriller psicológico, a niveles extremos y sin golpes de efecto que alejen al espectador de un principio empático conseguido desde el inicio de la película.
Título: Dogman.
Título Original: Idem.
Dirección: Matteo Garrone.
Intérpretes: Marcello Fonte, Edoardo Pesce, Nunzia Schiano, Adamo Dionisi, Francesco Acquaroli, Alida Baldari Calabria, Aniello Arena y Gianluca Gobbi.
Género: Drama psicológico.
Clasificación: Apta mayores de 16 años.
Duración: 103 minutos.
Origen: Francia/ Italia.
Año de realización: 2018.
Distribuidora: Impacto Cine.
Fecha de Estreno: 01/08/2019.
Pre-estreno de la 6ª Semana de Cine Italiano.
Puntaje: 8 (ocho)