El Ministerio de Cultura, a través del Complejo Teatral de Buenos Aires, y Fundación Cinemateca Argentina, en colaboración con VAIVEM, Camões IP, la Embajada de Portugal en la Argentina, la Fundação Calouste Gulbenkian y la Cinemateca Portuguesa, han organizado una Retrospectiva Pedro Costa, que se llevará a cabo del miércoles 1° al miércoles 8 de marzo en la Sala Leopoldo Lugones del Teatro San Martín (Avda. Corrientes 1530). El ciclo, que forma parte de la 10° Semana de Cine Portugués, está integrado por todos los largometrajes dirigidos por el gran realizador portugués, una de las voces más importantes del cine contemporáneo, desde su ópera prima O Sangue hasta su film más reciente, Vitalina Varela, que tendrá su estreno en la Sala Lugones en el mes de mayo. Pedro Costa viajará especialmente a Buenos Aires para acompañar la retrospectiva y presentará personalmente algunas de las funciones.
“En abril de 2002, la cuarta edición del Bafici ofrecía la posibilidad de descubrir a uno de los más relevantes realizadores contemporáneos. El portugués Pedro Costa –lo sabemos ahora– era la punta de lanza de una renovación incontenible en el cine de su país, del cual conocíamos apenas algunos nombres de veteranos todavía en actividad: João César Monteiro, Manoel de Oliveira. (…) Nacido en 1959, Pedro Costa no es ningún joven advenedizo. Su primer largometraje, O Sangue, fue estrenado en el Festival de Venecia en 1989, seguido por Casa de lava cinco años más tarde. En ambos títulos pueden apreciarse en forma larvaria algunos de los intereses que serían centrales en el resto de su obra. A partir de su tercera película, Ossos (1997), Costa comienza a desarrollar una poética cinematográfica singular, deudora de Bresson y la dupla Straub-Huillet, pero poseedora de una fuerza y espíritu propios. Con Ossos –“huesos” en portugués–, el director ejecuta magistralmente una carambola a dos bandas, reinventando al mismo tiempo el neorrealismo y el melodrama. Filmada en el empobrecido barrio de Fontainhas, en el corazón de Lisboa, con un equipo de rodaje reducido y un grupo de habitantes de la zona 
haciendo las veces de actores, el film narra la esforzada supervivencia de un puñado de jóvenes, dos de ellos recientes padres, en una realidad opresiva que las laberínticas callejas de Fontainhas no hacen más que reforzar.
Lejos del cine de denuncia social o la mera descripción de miserias, Costa concibe en Ossos (como suele concebirse en el cine: con talento y coraje) un universo. De todas formas, nada hacía suponer la radical profundización de forma y fondo que el director acometería en su siguiente película. Cruda, dura, lírica, por momentos sórdida, en carne viva, No Quarto da Vanda evita toda posible definición (ficción o documental, realismo o estilización, descripción o análisis) de ese mundo a punto de ser demolido, eliminado de la faz de la tierra, y elige un encuentro íntimo con jóvenes –y no tanto- caídos pero altivos, criaturas que se resisten a ser juzgadas o etiquetadas fácilmente. Juventude Em Marcha (2006), tercera entrega de la Trilogía de Fontainhas, cerraría el ciclo con una de las obras maestras del cine del siglo XXI”. (Diego Brodersen, Revista Ñ).
“De una película nacía otra y de cada una de ellas iban apareciendo nuevos personajes, que llevaban sus propios nombres y se interpretaban a sí mismos pero sin embargo –como en una noche transfigurada— también eran otros, que hablaban por sí mismos y por quienes los habían precedido en la vida y en el cine. Entre ellos está el inolvidable Ventura, figura central de Cavalo Dinheiro (2014), la única de sus películas estrenada en Buenos Aires (aunque todas las de Costa se conocieron en el Bafici y Mar del Plata) e inicio de un díptico que completa Vitalina Varela, una película con nombre propio. (…) Como ya sucedía en Cavalo Dinheiro , hay mucho de fantasmático en Vitalina Varela. Todo el film transcurre en una suerte de noche eterna, sus personajes parecen un ejército de las sombras, sus diálogos se dan entre los vivos y los muertos, y la negritud recién ahora parece haber encontrado, en el cine al menos, a su artista más cabal. Tanto que se podrían invertir las palabras de André Bazin sobre Ordet (1955), de Carl Dreyer. Decía Bazin: ‘El blanco es la base de todo, la referencia absoluta. El blanco es al mismo tiempo el color de la muerte y de la vida. Ordet es en cierta manera la última película en blanco y negro, la que cierra todas las puertas’. Ahora, se podría decir que en Vitalina Varela el negro es la esencia de todo, una metafísica, y que la de Costa es la última película en color, el non plus ultra”. (Luciano Monteagudo, Página/12).
La agenda completa del ciclo es la siguiente:
Miércoles 1°
O Sangue (Portugal, 1989)
Dirección: Pedro Costa.
Con Pedro Hestnes, Nuno Ferreira, Inês de Medeiros.
En una aldea de Portugal, las repetidas ausencias de su padre, sus misteriosos movimientos y su enfermedad preocupan al joven Vicente. Con ayuda de su amiga Clara, cuida a su hermano Nino, todavía un niño. Cuando el padre desaparece definitivamente, los hermanos, ahora huérfanos, forman con Clara una familia ideal y clandestina. Justo en ese momento, un tío de los niños aparece para reclamar la guarda del menor. Rodada en 1989, esta ópera prima poética, alucinada y nocturna, que transcurre en una nocturna tierra de nadie a orillas del Tajo, le valió a Pedro Costa el inmediato reconocimiento de la crítica internacional.
A las 15 horas (95’; DCP).
Ossos (Portugal/Francia/Dinamarca, 1997)
Dirección: Pedro Costa.
Con Vanda Duarte, Nuno Vaz, Mariya Lipkina.
En Estrela d’Africa, una ciudad próxima a Lisboa, un recién nacido ha llegado al mundo sin ser deseado ni bienvenido. Tina, su joven madre, se encierra con él en una habitación y enciende el gas para provocar la muerte por asfixia de ambos, pero el padre consigue rescatarlo a tiempo. Viven en las míseras calles de la ciudad y sobreviven gracias a la caridad. Ossos combina un elenco de reconocidos actores con no profesionales autóctonos, entre ellos, Vanda Duarte y su hermana Zita, dos mujeres fascinantes que años más tarde protagonizarán No Quarto da Vanda.
“A pesar de su dureza, de su ascetismo, de su rigor bressoniano, hay un gesto romántico en Ossos: un recién nacido se convierte en el signo de una lucha encarnizada del amor –cualquiera sea– contra la muerte. En el barrio de Fontainhas, una favela de los suburbios de Lisboa, la vida no parece tener mucho valor. El film de Costa se interna en ese mundo y consigue el raro milagro de filmar la miseria con la distancia justa, sin caer jamás en la condescendencia y en la vana estetización. Con actores no profesionales, que apenas pronuncian un puñado de palabras, Ossos irradia una luz rara, una potencia trágica absolutamente infrecuente en el cine de estos días”. (Luciano Monteagudo, catálogo del 4° Bafici).
A las 18 horas (94’; DCP).
Vitalina Varela (Portugal, 2019)
Dirección: Pedro Costa.
Con Vitalina Varela, Ventura, Manuel Tavares Almeida.
Vitalina lleva en su equipaje la espera, la carga con fuerzas. De Cabo Verde a Portugal y desde la memoria hacia una realidad fantasmagórica, emprende un viaje de reunión con un marido que ha dejado de existir, que partió en búsqueda de un futuro mejor, un marido a quien no ha visto lo que dura una vida. La pérdida, abrazada por la belleza del claroscuro, se encarna en su cuerpo. Sus ojos portan dolor, sus movimientos el luto y cada palabra pronunciada por su voz es una prueba de feminidad, humanismo y profunda dignidad. “En Vitalina Varela, Costa retoma un personaje secundario pero inolvidable que había sido determinante en Cavalo Dinheiro. En aquella película se anunciaba su historia, en esta se la ha filmado completamente. La hermosa Vitalina esperó 40 años el envío de un pasaje de avión por parte de su marido para reunirse con este en Lisboa. Cuatro décadas después, pisará la capital lusitana, pero para asistir al entierro de Joaquim, y además llegará tarde, incluso para el oficio religioso. De ahí en más, entre penumbras, Vitalina empezará su duelo. Costa impregna el duelo de una luz crepuscular y de sonidos no menos espectrales para acompañar a Vitalina en su rabia y su tristeza mientras asimila la irreversibilidad de la ausencia de su marido”. (Roger Koza, Con los ojos abiertos).
A las 20.30 horas (124’; DCP).
Jueves 2
Casa de lava (Portugal/Francia/Alemania, 1994)
Dirección: Pedro Costa.
Con Inês de Medeiros, Isaach De Bankolé, Edith Scob.
Una enfermera se toma muy en serio el cuidado de Leao, un inmigrante africano sin papeles que sufre un accidente en Lisboa. Cuando lo deportan, ella se encargará de dejarlo sano y salvo en su país natal, lo que la llevará a replantearse su triste y vacía vida.
“En esta película, al primer plano de un personaje que mira no le sigue el contraplano de
aquello que ve. Por el contrario, su duración se extiende hasta usurpar la de ese otro plano, acentuando su falta. De igual modo, las escenas se suceden escatimando su consecuencia o la escena previa de la que ellas serían consecuencia. Como resultado, los personajes son a la vez personas que miran y cosas vistas, en un espacio en tensión constante entre un pasado y un futuro tan determinantes como incognoscibles. En diálogo directo con Stromboli de Rossellini, Casa de Lava rechaza el planteo de la angustia del hombre frente al mundo como un problema de armonía entre alma y naturaleza, entendiéndolo en cambio como un antagonismo entre cuerpo y espacio físico que no admite una conciliación en lo religioso. A partir de ese gesto, Costa establece los límites de la relación que suele atribuírsele con el modernismo cinematográfico. (Hugo Salas, catálogo del 4° Bafici).
A las 15 y 21 horas (110’; DCP).
Ne change rien (Portugal/Francia, 2009)
Dirección: Pedro Costa.
Ne change rien nace de la amistad entre la actriz Jeanne Balibar, el ingeniero de sonido Philippe Morel y el cineasta Pedro Costa. Jeanne Balibar es una cantante que vive entre los ensayos y las grabaciones, los conciertos de rock y los cursos de canto lírico, entre un ático en Sainte-Marie-aux-Mines y el escenario de un café en Tokyo, de Johnny Guitar a la Périchole de Offenbach.
“Ne change rien gira en torno a la actriz Jeanne Balibar, que en los últimos ha desarrollado además una estimable carrera como cantante. No es la primera vez que una actriz actúa en un musical y posteriormente graba un disco – como otra Jeanne, Moreau, por citar un ejemplo – pero no existen muchos precedentes en que esta evolución artística haya sido filmada de un modo tan crudo como en esta cinta, eliminando cualquier vestigio de glamour y abrazando un estilo urgente y directo. De hecho, en las muchas horas de largas secuencias fotografiadas en un precioso blanco y negro, la cámara de Costa no resulta indiscreta, sino más bien omnipresente a lo largo de ensayos, conciertos y lecciones de canto, consiguiendo ser al mismo tiempo íntima y distante con respecto a la figura de Balibar y su equipo. Fiel a su ya conocido rechazo por las etiquetas, Costa realiza una mezcla entre un documental y un musical atípico, desafiando los lenguajes de ambos géneros”. (Vitor Pinto, Cineuropa).
A las 18 horas (100’; DCP).
Viernes 3
Ossos (Portugal/Francia/Dinamarca, 1997)
Dirección: Pedro Costa.
Con Vanda Duarte, Nuno Vaz, Mariya Lipkina.
A las 14 horas (94’; DCP).
Cavalo Dinheiro (Portugal, 2014)
Dirección: Pedro Costa.
Con Ventura, Vitalina Varela,Tito Furtado.
Mientras los jóvenes toman las calles, la gente de Fontainhas busca a Ventura, perdido en el bosque, en un film de misterioso claroscuro, como el de su mente deteriorada, perdida en un sueño febril tras una vida de trabajo duro y pobreza. Resistiendo con fiereza en el barrio lisboeta de Fontainhas, donde lleva más de dos décadas filmando, y flanqueado por el caboverdiano Ventura, Pedro Costa regresa estableciendo un pasadizo secreto entre la Revolución de los Claveles de 1974 y la actualidad en Lisboa.
“El reverso del 25 de abril de 1974 que trajo esperanza y libertad para Portugal es un día de miedo e incertidumbre para los inmigrantes llegados de las colonias, obreros aterrados ante la posibilidad de ser detenidos o expulsados. En la cabeza del protagonista, Ventura, sigue siendo una memoria muy viva a pesar de los cuarenta años transcurridos: no hay ‘ayer’ y ‘hoy’, es todo lo mismo. Cavalo Dinheiro es un coro de espectros y zombis cargados de sacrificios y derrotas, hombres y mujeres con las cicatrices de las ilusiones perdidas que caminan entre ruinas y sombras, siempre al margen de la Historia, invisibles. Una fantasía expresionista que engrandece y depura las posibilidades de la imagen digital, que Costa sublima a fuerza de tiempo y de trabajo para ‘oscurecer la oscuridad’. El resultado es un exorcismo colectivo, una experiencia sensorial que nos sacude y transforma. Una obra mayor que inspira, sobre todo, palabras de agradecimiento”. (Martin Pawley).
A las 16.30 horas (103’; DCP).
No Quarto da Vanda (Portugal/Alemania/Suiza, 2000)
Dirección: Pedro Costa.
Con Vanda Duarte, Lena Duarte, Zita Duarte.
Vanda Duarte vive en las Fontainhas, uno de los barrios más degradados de Lisboa, donde impera el tráfico de drogas. El cuarto de Vanda es un cuarto de muerte, aunque allí pasan muchas cosas vitales. Vanda es una mujer con fuerza, una resistente ante los embates de la muerte.
“En No Quarto da Vanda, la vieja tradición erigida en un siglo analógico podía proyectarse
en un nuevo episodio de la imagen en movimiento. Pedro Costa demostraba que el cine no es una cuestión de imágenes, sino de planos, porque basta un buen celular para fabricar imágenes, pero se necesita trabajar muchísimo para que de estas se pueda componer un plano. (…)¿No es aún hoy conmovedor y sorprendente reencontrarse con Vanda, su hermana y todos los habitantes de un barrio ahora inexistente? Esos planos que ya tienen más de veinte años irradian una forma de vida y conjuran así el olvido. Es que No Quarto da Vanda fue la primera gran película del siglo. Había en este film una poética del espacio jamás vista hasta entonces, como también una política de lo comunitario, cuyo secreto residía en la relación que establecía Costa con sus intérpretes. Los interiores de las casas precarias de Fontainhas y los momentos de ocio de los desposeídos sostenían la tenue narración de una película capaz de transformar las paredes de las casas, los pasadizos angostos del barrio, el fuego prendido en una esquina para cocinar, las bolsas de plásticos y los objetos de los cuartos, como asimismo los rostros, los brazos con jeringas colgando de estos y formas de conversación en signos misteriosamente vitales”. (Roger Koza, Ípsilon).
A las 20 horas (171’; DCP).
Sábado 4
¿Dónde yace tu sonrisa escondida? (Où gít votre sourire enfoui?; Francia/Portugal, 2001)
Dirección: Pedro Costa y Thierry Lounas.
Entre 1963, el matrimonio de cineastas franceses Jean-Marie Straub y Danièle Huillet desarrollaró una colaboración cinematográfica conjunta única en la historia del cine. El cineasta Pedro Costa tuvo la suerte de presenciar el montaje de la tercera versión de la película Sicilia!, de Straub y Huillet, un proceso que recogió en este film documental y que revela tanto las ideas de la pareja sobre su obra como sobre el arte de dirigir películas en general.
“Este documental sobre la mítica pareja de cineastas es una atractiva lección de cine y, a la vez, el retrato preciso y original de dos personalidades. La película describe el trabajo sobre el montaje de Sicilia!; mientras ella trabaja obsesivamente en la moviola él no para de caminar de un lado para otro, ofreciendo largos y divertidos monólogos sobre el lenguaje del cine y sus particularidades. Él reflexiona y ella actúa. Llevados por esta tensión, que no impide que se mantenga un equilibrio entre la teoría y la práctica, discuten y exageran sus características contrapuestas, como si estuvieran actuando para la cámara situaciones de screwball comedy. El amor por el cine y el amor entre ellos parece ser, al final del recorrido, la misma cosa”. (Juan Villegas, catálogo del 4° Bafici).
A las 14 horas (104’; DCP).
Ne change rien (Portugal/Francia, 2009)
Dirección: Pedro Costa.
A las 16.30 horas (100’; DCP).
Juventude em Marcha (Portugal/Francia/Suiza, 2006)
Dirección: Pedro Costa
Con Ventura, Vanda Duarte, Beatriz Duarte.
En Juventude em Marcha, Costa regresa al barrio de Fontaínhas, ya medio desaparecido. El
itinerario errante es liderado por Ventura, un hombre maduro que fue echado por su esposa y que deambula por entre las callejuelas hipnóticas. La cámara lo sigue, espera, escucha, y ahí se queda, en los encuentros y desencuentros de este hombre que deja caer en el camino algunas palabras y al mundo entero.
“Decir que Pedro Costa es uno de los más grandes cineastas del mundo puede sonar a provocación. Pero lo he dicho y lo repetiré: Pedro Costa es uno de los más grandes cineastas del mundo, por lo menos uno de los más relevantes, y no hay nada intencionadamente perverso en mi afirmación. El juicio final debería dejarse en manos del público –a quien Costa cede tanto– y sólo puede seguirse viendo sus películas. Ver el trabajo de Costa me da escalofríos; es una obra de lo más misteriosa, inusual e inclasificable, plagada de fantasmas del pasado y del presente. Juventude em Marcha es una suerte de montaje surrealista, donde el placer se encuentra en las coincidencias entre lo que parecen ser episodios aleatorios e inconexos”. (Mark Peranson, Cinema Scope).
A las 20 horas (156’; DCP).
Domingo 5
Juventude em Marcha (Portugal/Francia/Suiza, 2006)
Dirección: Pedro Costa
Con Ventura, Vanda Duarte, Beatriz Duarte.
A las 14.30 horas (156’; DCP).
Martes 7
Cavalo Dinheiro (Portugal, 2014)
Dirección: Pedro Costa.
Con Ventura, Vitalina Varela,Tito Furtado.
A las 15 horas (103’; DCP).
O Sangue (Portugal, 1989)
Dirección: Pedro Costa.
Con Pedro Hestnes, Nuno Ferreira, Inês de Medeiros.
A las 18 horas (95’; DCP).
¿Dónde yace tu sonrisa escondida? (Où gít votre sourire enfoui?; Francia/Portugal, 2001)
Dirección: Pedro Costa y Thierry Lounas.
A las 21 horas (104’; DCP).
Miércoles 8
No Quarto da Vanda (Portugal/Alemania/Suiza, 2000)
Dirección: Pedro Costa.
Con Vanda Duarte, Lena Duarte, Zita Duarte.
A las 14 horas (171’; DCP).
