Por Alan Prince
Tras un breve paso por La Rural en la edición anterior, la convención que reúne a todos los fanáticos de la cultura pop regresa a Costa Salguero y mejor no pudo irle. Como suele pasar en cada edición durante tres días vertiginosos -por lo general en los meses de junio y diciembre- contamos con invitados internacionales y un acercamiento a nuestros más grandes ídolos. El evento esta vez se celebró entre el 2 y el 4 de junio con una notoria mejoría en la afluencia de público si lo comparamos con el anterior que coincidió con el Mundial de fútbol e incluso con algún partido de la selección argentina.
Con los estudios mostrando sus caballitos de batalla, tenemos a la Warner con The Flash y Blue Beetle, además de Barbie o las imponentes maquetas fotografiables de Stranger Things y Wednesday de la mano de Netflix. Un juego interactivo sobre la nueva película de Las tortugas ninja por parte de Paramount o los videojuegos por parte de Flow.
Los filmes cambian pero lo que sigue intacto es la pasión de los fans por ellos, así como el merchandising que abarca generaciones, desde el Ecto-1 de la ochentera Los Cazafantasmas hasta los más recientes peluches de los nuevos juegos de Pokemon. Pasado y futuro conviven en mismo lugar y también los cosplays adornan esta gran convención que tiene su máxima explosión los sábados, en contraposición con los viernes donde la mayoría de los adultos trabajan, o del domingo en el que muchos van a último momento. Tenemos personajes de ayer, de hoy y siempre.
Los de Star Wars son ya un clásico, Spider-mans que aprovechan la ola del reciente estreno del filme animado y los Guardianes de la galaxia que nos recuerdan cuán emotiva fue su última entrega, son algunos de los personajes que pasearon por esta edición.
Pero también, pese a escenarios diferentes, tuvimos grandes novedades que hacen de esta Comic Con algo muy especial: sus invitados.
Tan criticados como amados, y pese a que las redes sociales son a veces dañinas, resulta evidente la convocatoria que tienen los presentes:
Andy y Barbara Muschietti: director y productora de exportación
Los hermanos provenientes de Argentina lograron triunfar en Hollywood luego de haber hecho un trabajo más que encomiable con los dos filmes del payaso It; en esta oportunidad saltaron al género de superhéroes, con The Flash, una película que será un puente entre el infravalorado universo de Zack Snyder y la nueva propuesta de James Gunn.
Habiendo sido presentados energéticamente por Luca Martin (Host de esta edición y mejor conocido por ser el hijo de Matías Martin) luego fue el turno de Matías Lértora, uno de los miembros del staff del clásico sitio web Cines Argentinos, y también un fan acérrimo del sello DC.
Durante la entrevista se dejó entrever que Muschietti (Andy) acudió a Lértora para algunos detalles del filme. En tanto que los hermanos también recordaron cómo les había llegado la propuesta 4 años atrás donde debieron afrontar la devastadora Pandemia del Covid-19. Lejos de quejarse de lo demorada que fue la producción -el filme tardó casi una década en materializarse-, para ambos es un mimo a su infancia, quienes crecieron con el Superman de Christopher Reeve y el Batman de Michael Keaton, actor que forma parte del filme.
Desde luego que, sin olvidarse de su público, mostraron algunos tapes sobre el filme, donde vimos escenas no mostradas en los tráilers. Spoilers para algunos, familiares para aquellos que ya pudieron ver el filme en funciones especiales (el estreno oficial en Argentina es el 15 de este mes).
El cine y la TV: Evanna Lynch y los hermanos Moncada
Triunfar en la agresiva industria de Hollywood no es exclusiva de estadounidenses. Aprovechando el anuncio de una nueva versión de Harry Potter, esta vez en forma de serie y recordándonos la saga fílmica, tenemos a la irlandesa Evanna Lynch, quien interpretó a Luna Lovegood, una aliada de Potter que tuvo sus momentos en los últimos filmes, además de dar su salto al musical A Very Potter Senior Year y los videojuegos que comprenden desde La orden del Fénix hasta Las reliquias de la muerte.
Lynch recordó con cariño cómo fue que la saga de J.K Rowling le cambió la vida a nivel profesional, habiéndole abierto numerosas puertas luego de su interpretación. Pero también, entrando en zonas mucho más personales, su personaje la ayudó a superar sus problemas de anorexia, algo que no lograba sortear con psicólogos.
Lynch brindó un personaje tan redondo en la saga de Harry Potter que será difícil ver a otra actriz en la piel de la excéntrica Luna Lovegood.
Por otro lado, sumándose a los meet and greet y para hablar con el público, los hermanos Luis y Daniel Moncada (nacidos en Honduras), desde un primer momento mostraron la enorme brecha que existe con los parcos hermanos Salamanca de la serie de culto Breaking Bad.
Con alegría recordaron la mítica creación de Vince Gilligan, detallando y haciendo estallar en risas al recordar que sus breves pero potentes apariciones se debían a que siempre en su presencia algún personaje era asesinado por ellos y que la intención no era que la serie finalizara en pocos capítulos.
Vestidos de traje gris, los ficticios sicarios se dieron el gusto de fotografiarse con sus fans, simulando que serían los últimos retratos antes de pasar al otro lado.
En el escenario además de ver a las estrellas internacionales tuvimos el agrado de escuchar en versión sinfónica a la Hakuna Sonata Orchestra que interpretó los emblemáticos temas de Batman y Superman, entre otros, para el deleite de todos.
Rossy Aguirre y Patty Azan, actrices de doblaje, recordadas por la voz de Bellota en Las Chicas Superpoderosas o Cartman de South Park, se sumaron a la nueva lista de invitados que la Comic Con implementó hace poco con la finalidad de acercarle al público argentino esas voces que resonaron en nuestra infancia. Logrando una interacción mucho más próxima y dándole la posibilidad a sus fans de grabarles un mensaje o video y por qué no, firmar autógrafos como los viejos tiempos.
Sumado a las estrellas, los stands, las charlas en las que autores novatos presentan obras o figuras de renombre como Ciruelo hicieron acto de presencia. Esta edición no sólo nos transportó a través del tiempo donde la TV daba sus primeros pasos, sino también a una feria medieval que tuvo lugar al aire libre.
Y así se nos fue otra edición de la Comic Con. Esta convención es como un viaje en el tiempo al multiverso donde todo es posible, dentro del predio (además del patio) así también como a la salida. Antes de llegar a la avenida conviene visitar Trixie (recomendación personal), una hamburguesería que es un auténtico salto temporal a los años 50 (como el primer viaje de Marty Mcfly a esta añorada década).
Ahora sólo queda esperar a diciembre y mientras tanto estar atentos al anuncio de quiénes serán nuestros próximos invitados. Como siempre lo más importante es tener la fortuna de contar con un lugar donde podamos volver una y otra vez, casi como un rito, a celebrar la amistad respetando la multiplicidad de gustos. Eso es ni más ni menos la Argentina Comic Com.
Gracias por la invitación.