Por Alan Prince
No cabe duda de que V: Invasión extraterrestre (1983-1985) se mantiene en el tiempo como una de las series ochentosas más recordadas por el gran público. De no haberse realizado, productos como Los 4400, The Walking Dead o The Man in the High Castle no hubiesen visto jamás la luz.
Concebida inicialmente como un drama político, la agenda de aquel entonces demandaba más contenido de ciencia ficción y la premisa que partía de un hipotético nazismo resurgiendo y conquistando el mundo pronto fue cambiado por la llegada de extraterrestres a la Tierra.
De aspecto en apariencia similar a los humanos, salvo por la intolerancia a la luz o una voz distinguible, V: Invasión extraterrestre, a 40 años de su primera transmisión, nos responde a una inquietante pregunta sobre cómo sería una llegada de alienígenas, pero lejos de ser algo fantástico este universo que empezó con una miniserie, luego se extendió a otra secuela y una serie entera para transportarnos a esa realidad.
Los visitantes, así se los llamaba, llegaban “en son de paz” para luego convocar a las potencias mundiales con un discurso pacifista donde además expresaban su necesidad de ayuda de los humanos para salvar de la extinción a su propia civilización; a cambio ofrecen darnos su tecnología, mucho más avanzada que la nuestra. Repercutiendo en todos los sectores sociales los tintes políticos, la incertidumbre sobre la llegada de un nuevo gobierno se percibe como un reflejo que hoy persiste no solo en nuestro país: la serie era un mensaje mundial pegándole duro a aquellos gobiernos fascistas.
Para hacerles frente a los visitantes teníamos al camarógrafo de TV Mike Donovan (Marc Singer) y la científica Juliet Parrish (Faye Grant) como líderes de la rebelión, enfrentándose a la líder Diana (Jane Badler) que literalmente poco a poco iba mostrando su verdadero rostro, de fisonomía reptiliana, donde la villana provocó un shock en la audiencia al revelar la peculiar forma sobre cómo se alimentan estos seres de oscuras intenciones. Fue tan impactante el efecto especial que hasta se hizo popular el nombre del técnico responsable: Leo Lotito Jr.
Si bien la serie en su momento fue bajando su presupuesto, como así también su calidad argumental, su potente mensaje mundial trascendió las barreras del tiempo que, impulsada por un gran marketing, se sumaba también que el actor Robert Englund, siendo parte del reparto como un reptiliano que se volvía aliado, poco después impulsaría su carrera al interpretar al icónico Freddy Krueger. La dualidad entre la bondad de Willie, su recordado rol, con la perversión sádica de la creación de Wes Craven generaba un contraste llamativo que intrigaba al público sobre su desempeño.
Hoy la serie creada por Kenneth Johnson (también responsable de El hombre nuclear y El increíble Hulk) goza de una enorme popularidad y a su buen hacer podemos sumarle el término reptiliano que la cultura popular se hizo propia.
La llegada a HBO Max es un acierto y un golpe nostálgico para sumar al visionado de series clásicas que valen la pena ver.
Título: V – Invasión extraterrestre, V: La miniserie original, V: La batalla final, V: La serie.
Título original: V, V: Final Battle, V: The series.
Dirección: Kenneth Johnson.
Creador: Kenneth Johnson.
Intérpretes: Marc Singer (Mike Donovan), Jane Badler (Diana), June Chadwick (Lydia), Faye Grant (Dra. Juliet Parrish), Michael Ironside (Ham Tyler), Frank Ashmore (Martin/Phillip), Robert Englund (Willie).
Género: TV, Ciencia ficción, Acción, Drama.
Calificación: Apta para mayores de 13 años.
Duración: 197’ (sólo la miniserie original).
Origen: EE.UU.
Año de realización: 1983-1985.
Plataforma: HBO Max.
Fecha de reposición: 05/07/2023.
Puntaje: 8 (ocho)
