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viernes, 22 noviembre 2024
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La polémica detrás de Terrifier y su sádico asesino

Por Soledad Colina

Art the Clown es un siniestro personaje cinematográfico, una creación ideal para ser figura central en una película del género de terror. Bajo su particular disfraz en tonos blanco y negro de un payaso mudo se esconde un maníaco que mata brutalmente a aquel que se le cruza o lo incomoda. Pero en realidad sería la palabra asesinar, que es matar a otro/s con ensañamiento y alevosía, la más adecuada para definir las atrocidades que este payaso ejecuta sin el más mínimo decoro, detalles que serán mucho mejor desarrollados más adelante en esta nota.

La primera aparición de Art the Clown en pantalla fue en el cortometraje Terrifier (2011) y posteriormente en la película en episodios All Hallows’ Eve, del año 2013, dirigida por el realizador Damien Leone, el gran creador del personaje. Ya desde este aceptable comienzo y muy a pesar de su corta duración de solo 82 minutos, se puede apreciar el gran espíritu vintage de la historia que propone Leone, más ligado a un tipo de cine de terror que remite directamente al pasado y también a su veta más explícita y de pocas concesiones. La protagonista es Sara (Katie Maguire), una joven que cuida a dos pequeños durante la noche de Halloween. Aburrida y buscando qué mirar encuentra un viejo casete de VHS, dónde se concentran tres cortometrajes de terror y el mismo payaso macabro, que es Art the Clown, mata sin piedad a varias personas. Nerviosa tras su visionado, Sarah sentirá que esas historias son demasiado realistas y que la ficción en algún momento se podría cruzar con la realidad. Esta película, de bajísimo presupuesto y producción, pasó sin pena ni gloria, pero sin embargo sembró un camino para Art the Clown, generando una lógica empatía con el fandom (fanáticos) del cine de terror, que vio en Art a una futura figura icónica del género y a la altura de otros pares como Michael Myers, Freddy Krueger o Jason Voorhees.

Luego, apenas tres años después, en el año 2016, llegaría Terrifier, tambien dirigida por Damien Leone y dónde el payaso asesino tendría un papel mucho más central. Estamos otra vez en la noche de Halloween y dos amigas, Tara (Jenna Kanell) y Dawn (Catherine Corcoran) entran a una pizzería, una de ellas en estado de ebriedad tras pasar por una fiesta temática. En el lugar se cruzarán con Art. El payaso se enamora de Tara y hasta le dará un anillo de compromiso, pero ella lo rechaza, lo que genera su ira. Es a partir de allí que comenzarán los crímenes más atroces. Art es aquí interpretado con prestancia por el actor David Howard Thornton; su presencia es ideal para darle entidad a uno de los personajes más aterradores y macabros que dio el cine de terror en mucho tiempo. Nuevamente el bajísimo presupuesto no fue impedimento para mostrar brutales y sangrientas muertes, logradas gracias a caseros FX, disciplina dónde Leone era un especialista antes de dedicarse a dirigir cine. Este es uno de los puntos que los fans del cine de terror supieron apreciar más, la de una producción que llevaba toda su explicitud al límite, transgrediendo a la industria y de paso a la censura norteamericana, que es muy pacata y moralista.

Este 2022 Damien Leone decide dar un paso más y lanzar la segunda parte de la historia, obviamente titulada Terrifier 2. Aclaro que cuando me refiero a dar a un paso más esto tiene que ver con una puesta mucho más dura, brutal y en in crescendo en términos sangrientos y también en relación a las anteriores apariciones y acciones de Art. En esta oportunidad no hay límites y los cuerpos son destrozados, despedazados, quemados y muchas cosas peores más, todo aderezado con una pizca de un macabro humor absurdo y toques de realismo. A raíz de esta nueva y arriesgada apuesta del director, se impuso una llamativa polémica: ¿es Terrifier 2 una de las películas más sangrientas y explicitas de la historia del cine? Quienes somos admiradores del cine de terror sabemos que esto no es así, que hay películas mucho más bravas que esta, pero sí hay que darle el mérito a Leone por su valentía de poder lograr un producto decente y digno, que puede gustar o no, pero que está en la actualidad en boca de todos. Su estreno en los cines comerciales de Estados Unidos resultó un éxito sin precedentes para este tipo de cine de clase B, ese que se produce en los márgenes del correcto y hasta opresor cine clase A (mainstream). Terrifier 2 costó la módica suma de 250.000 dólares y recaudó solo en su país 10.000.000 de la misma moneda. Esto demuestra un negocio por demás rentable y la próxima continuidad de Art en dos historias más. El dato de color lo dan los supuestos espectadores que durante algunas proyecciones sufrieron de desmayos, vómitos y demás efectos ante el visionado de semejantes y atroces asesinatos.

Volviendo a Terrifier 2, su trama tiene lugar un año después de la anterior masacre. Siempre en una noche de Halloween, una joven viuda, Bárbara (Sarah Voigh), cena con sus hijos, la adolescente Sienna (Lauren LaVera) y el púber Jonathan (Elliott Fullam) en su casa. Los tres están mirando en TV una entrevista que le realizan a la única sobreviviente de la anterior película, cuyo rostro fue destrozado. Mientras Art, junto a una imaginaria enamorada, comienza nuevamente con su raid de muerte. Esta vez el metraje se extiende mucho más y durante casi dos horas y media, seremos testigos de la carnicería que Art va dejando en su camino. No hay demasiados detalles digitales a la vista, todo luce casi artesanal y esta puesta logra un aspecto realista que eriza la piel del miedo y la impresión. El morbo se apropia de los espectadores y con lógica razón. Las películas Splatter (aquellas donde un asesino mata a muchas personas y sin razón aparente) cumplen esa función: la de espantar y aterrar, pero también la de comprender que esto es un artificio y su función es meramente de entretener. Sus momentos de humor, ante un panorama tan brutal, nos ayudan a no tomar demasiado en serio al personaje y a sus enfermizas ansias de matar. Art, este sanguinario payaso asesino, sólo es un personaje de ficción y desde ya para ser visto por aquellos espectadores que tengan tolerancia a este tipo de cine y no un estómago demasiado débil. El resto, por favor abstenerse. Art the Clown vino a este mundo cinematográfico para romper reglas y de paso quedarse por un largo rato.

Nota: Terrifier (2016) está disponible para ver en la plataforma de streaming Amazon Prime Video. Terrifier 2, en cambio, aún no tiene fecha de estreno en las salas de los cines argentinos.

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