Tras una breve exhibición en selectas salas de nuestro país, acaba de estrenarse en Netflix El Hombre que Amaba los Platos Voladores, esperado regreso a la gran pantalla de Diego Lerman, dos años después de dar a conocer El Suplente, y en el que constituye su séptimo largometraje. Filmado en locaciones de Córdoba y Buenos Aires, nos trae la historia del recordado José de Zer, periodista de Revista Gente durante la década del ’70, y quien luego investigaría, para el noticiero Nuevediario, la presencia de extraterrestres en suelo local.
Una experiencia reveladora -el avistaje de un objeto volador no identificado- llevó al protagonista, en brillante caracterización de Leo Sbaraglia, a percibir que no estamos solos en el universo. Ante los ojos del mundo, se animó a mostrar lo que nadie antes se atrevió. Un hombre en plena crisis existencial, minúsculo ante la energía superior que lo convoca, partió rumbo al encuentro de su propio sentido de vida. Testigo de hechos que lo excedían, tan fantásticos y desconcertantes, debía cumplir con la ardua tarea de divulgar lo incomprobable. Sobre su persona confluían miradas contrapuestas. ¿Se trataba de un farsante? ¿De un loco, un místico o un chanta?
El otrora cronista de espectáculos supo adornar los acontecimientos para no dejar margen de duda, creer o reventar. El hallazgo parecía llegar en inmejorable instancia: el hastío de la gente, entre movilizaciones, inestabilidad económica y enfrentamientos políticos, pedía un anhelado respiro. Argentina, 1984, las cosas no han cambiado tanto. Sin precedentes en la TV vernácula, la noticia sensacionalista auguraba revolucionar a los medios; solo restaba convencer a los más altos directivos del canal. ¿Qué sería de la humanidad sin misterio?, se pregunta de Zer, confrontando el miedo a lo desconocido. Exorbitantes cincuenta puntos de rating acabarían dándole la razón.
Lerman lleva a cabo una notable ambientación de época, en igual medida que un sobresaliente trabajo de cámara, sumamente original a la hora de recrear escenas majestuosas. Acompañando a un formidable Sbaraglia, capaz de brindar otro retrato para el recuerdo, el film se vale de un sólido y estelar reparto de intérpretes, encabezado por Osmar Núñez, Norman Briski, María Merino, Agustín Rittano, Sergio Prina, Mónica Ayos, Renata Lerman, Daniel Aráoz y Guillermo Arengo, efectivos, en lo individual y colectivo, al momento de lograr registros de comedia que bordean el absurdo.
En aras de desafiar aquello de que ‘la única verdad es la realidad’, tal y cómo decía el General -utilizando el concepto aristotélico-, el intrépido periodista aseguró su lugar en la cultura popular argentina. Apto para gestar la escena perfecta, hábil y carismático, recurrió a todo tipo de artilugios, formulando la clase de preguntas que buscaban persuadir y convencer a su interlocutor; y de ser necesario, maquillar lo fake. Porque la TV en vivo así lo pide y el mensaje emitido solo conoce formas extravagantes en el rigor de la inmediatez: ¡Mirá, Chango!
Título: El hombre que amaba los platos voladores. Título original: Idem. Dirección: Diego Lerman.
Intérpretes: Leonardo Sbaraglia, Sergio Prina, Osmar Núñez, Renata Lerman, María Merlino, Agustín Rittano, Norman Briski, Daniel Aráoz y Mónica Ayos. Género: Basada en hechos reales, Comedia, Drama. Calificación: Apta para mayores de 13 años.
Duración: 107 minutos. Origen: Argentina. Año de realización: 2024.
Fecha de estreno (limitado) en cines: 26/09/2024. Fecha de estreno en Netflix: 18/10/2024
Puntaje: 8 (ocho)
