Por Iara Reboredo
Llega a las salas la secuela de El robo perfecto (2018). El robo perfecto: Pantera, una película que combina adrenalina, acción y una intrigante dinámica entre el policía corrupto Nick O’Brien (Gerard Butler) y el astuto criminal Donnie Wilson (O’Shea Jackson Jr.). En esta nueva entrega, la película lleva al espectador a explorar las zonas grises entre el bien y el mal.
Luego de haber visto la primera película para poder ver esta, pude notar que la dirección de Christian Gudegast se mantiene fiel a la esencia de su predecesora, pero traslada la trama a Europa y presenta un robo de diamantes a escala global. Para ser franca, estos cambios de locaciones constantes me parecieron una pérdida total de tiempo, presupuesto y calidad; fueron excesivos, a nivel de que más de la mitad de la película nos la pasamos leyendo ubicaciones geográficas, acompañadas de planos de rutas tediosos y repetitivos.
Lo que realmente distingue a El robo perfecto: Pantera es su enfoque en la relación entre Nick y Donnie, quienes, tras el caos del primer film, se ven obligados a colaborar para llevar a cabo un robo que podría cambiar sus destinos. La película se limita a ser una simple secuela de acción; la dinámica entre Gerard Butler y O’Shea Jackson Jr. es uno de los puntos más deplorables de la película. Ambos actores logran mantener la química entre sus personajes, pero no llegan a que sea un detalle cautivador, no consiguen ser una dupla memorable para este tipo de películas como quizá lo fueron Toretto y Brian en la saga de Rápidos y furiosos, o Lee y Carter en Una pareja explosiva.
Uno de los aspectos más decepcionantes de esta película es la mala decisión sobre las secuencias y el montaje final; desde escenas que parecen completamente sobreactuadas, hasta recortes de planos que se notan en los jump cuts sin sentido que se generan, por momentos la película no fluye porque los cortes son muy brutos, se ven, y si bien eso no altera a cualquiera que la vea, si ocasiona una traba en el proyecto.
Además, en algunos momentos la trama se siente algo predecible, y el conflicto central se alarga innecesariamente, como si los guionistas buscaran estirar la historia solo por mantener la tensión. Algunos giros narrativos, aunque efectivos en esta clase de películas, están hechos para sorprender, pero a veces pueden sentirse forzados, perdiendo parte de la sutileza que generaba intriga en la película original.
A decir verdad, la parte más interesante de la película es la escena del robo en sí, fueron los únicos 10 minutos de toda la película que medianamente lograron captar mi atención. En términos de la puesta en escena, la película impone secuencias de acción que incluyen persecuciones a gran escala, enfrentamientos cuerpo a cuerpo y escenas de fiestas donde, casualmente, todos se encuentran con todos. A pesar de que el salto de locaciones sea un recurso excesivo en esta película, la ambientación y los escenarios no están mal ejecutados.
El robo perfecto: Pantera es una secuela que arrastra a esta posible saga a otro desempeño mediocre del cine de acción. Puede ser una buena opción para pasar el tiempo y ver algo sin pensar, quizá mejora la dinámica entre sus personajes principales a diferencia de la primera entrega, pero no creo que ofrezca algo mejor que esta. No sé si existen aún fanáticos de la franquicia, pero sinceramente creo que hay películas sobre historias de robos mucho mejor ejecutadas.
Título: El robo perfecto: Pantera.
Título original: Den of Thieves 2: Pantera. Dirección: Christian Gudegast.
Intérpretes: Gerard Butler, O’Shea Jackson Jr., Evin Ahmad, Salvatore Esposito, Jordan Bridges, Rico Verhoeven, Orli Shuka, Stéphane Coulon, Cristian Solimeno y Nazmye Oral. Género: Secuela, Acción, Thriller. Calificación: p/m 13. Duración: 120 minutos.
Origen: EE.UU./ Canadá/ España.
Año de realización: 2025.
Distribuidora: Diamond Films.
Fecha de estreno: 16/01/2024.
Puntaje: 3 (tres)