Por Mónica Grau Seto, corresponsal en España
El guionista, ilustrador y director francés Benoît Chieux se formó en la Escuela Emile Cohl y formó parte del estudio Folimage. Es un artista galardonado en diferentes ocasiones por sus trabajos, destacando Ma petite planète chérie (Premio UNICEF, 1995; Prix Fondation, Francia), luego le siguió su trabajo como ilustrador y guionista en La Navidad de Charlie (Premio del Jurado en Stuttgart, 1997, y Cartoon d’Or (1998). Codirigió junto a Damien Louche-Pélissier Patate et le jardin potager (Pulcinella de Oro, 2001).
Es autor de la serie de televisión infantil Mica y en 2004 colaboró con Jacques-Rémy Girerd en el largometraje Mia et le Migou en 2008, desempeñándose como creador gráfico y director de arte. En 2013 codirigió el largometraje Tante Hilda! junto a Jacques-Rémy Girerd y en 2016 fue nominado al Premio César con El jardín de medianoche.
Con Sirocco y el reino de los vientos (2023) estamos ante su primer trabajo en solitario como director, la historia surge de una serie de ilustraciones que ya había realizado hacia un tiempo, en ellas destacaba el poder del viento sobre la tierra, y además también aparecían un niño y una niña. Mostró la idea al productor del filme Ron Dyens y trabajaron en el guion con Alain Gagnol, todo fue tomando forma, pero siempre con el viento como protagonista.
La historia empieza con la narración de un mundo habitado por extraños seres y en el cielo, siempre rodeado de nubes, vive el solitario Sirocco. Todo esto nace de la mente creativa de Agnès, ella es una joven escritora de cuentos y ha creado esta fantasía donde Siroco el mago vigila y controla los vientos y tormentas. Sirocco igual que la escritora es un personaje solitario, ella perdió a su hermana hace tiempo y vive con nostalgia desde su fallecimiento. En la saga de cuentos que escribe narra que en una ocasión creó unos pequeños juguetes de madera para hacerle compañía al mago, pero estos eran como niños y al final él los liberó.
Un día Agnès debe cuidar de las dos hijas pequeñas de una buena amiga, agotada por el proceso de la escritura de otro cuento Del Reino de los Vientos se retira a descansar, y mientras las niñas deciden leer una de sus historias sucede algo mágico. Uno de los personajes cobra vida, es un muñeco de madera amarillo y dibujando en el suelo abre un portal y las pequeñas son transportadas al Reino de los Vientos, allí no tienen aspecto humano y se transforman en dos gatitas, pero con vestidos de niñas. A partir de allí deberán hallar el camino a casa, mientras que podrán vivir aventuras y conocer a los curiosos habitantes.
Un encuentro muy especial marcará su conexión con esta fábula, cuando conozcan a Selma una hermosa cantante con aspecto de ave, descubriendo que este personaje de ficción tiene un poderoso vínculo con Agnès, podrán comprender porque la escritora creó este mundo y sigue narrando hermosas historias que permiten que sus personajes vivan en la mente de muchos pequeños, a la vez que también podrán conocer al mago y averiguar si es malvado o no. Selma es un personaje que enamora, su voz y su canto es como la respiración, inhala y exhala y acompaña al viento y a los personajes en este viaje.
Hay un detalle curioso, los personajes femeninos están muy bien diseñados y destacan, y además nos muestran mucho su personalidad y sentimientos, mientras que los masculinos son como esbozos o caricaturas. Referente a los escenarios y entorno de este mundo mágico, apenas hay sombras, las casas se asimilan a bloques de juguetes infantiles apilados uno encima de otro, con colores vivos y degradados.
Las historias de portales a otros mundos siempre ha sido un recurso increíble para que los pequeños exploren y conozcan otras realidades, que además les permite valorar de donde provienen. Es algo que hemos visto con Alicia en el País de las Maravillas, con Las Crónicas de Narnia, La historia sin fin, El Mago de Oz o Peter Pan.
Pero si hay una clara referencia que el propio director ha citado, tanto por la idea de portal como de estética, es la del dibujante y creador Hayao Miyazaki. El artista nipón que llevó a Studio Ghibli a lo más alto en animación japonesa, junto a Isao Takahata, Miyazaki con grandes títulos como La Princesa Mononoke (uno de mis películas favoritas), Mi vecino Totoro o El Viaje de Chihiro, con el que este filme guarda bastantes similitudes. Y Takahata reconocido por ser el creador de las míticas series Heidi, Marco o Lupin entre otros títulos.
En la parte estética, minimalista, pero a la vez colorida sus influencias son el holandés Paul Driessen, con su característico sello de recrear el movimiento fluido y entretejer escenas y dividir la pantalla y, por otro lado, Paul Grimault, considerado como el Walt Disney francés, como es el ejemplo de esta ciudad de bloques verticales.
La idea no es ningún viaje iniciático sino sencillamente observar la inocencia y el comportamiento de dos niñas, Juliette y Carmen, junto a su bondad al interactuar con otros personajes, con ello consigue que el espectador disfrute bajo esa mirada infantil, no son heroínas sólo son dos niñas normales (Benoît es padre de dos niñas por lo que la observación de sus propias hijas también ha servido de inspiración). La banda sonora y sobre todo la hermosa voz de la cantante Célia Kameni, que además improvisó durante la grabación con un resultado altamente creativo y onírico. Todo ello convierte al filme en una auténtica experiencia sensorial, con frescura por los colores, formas y sonidos que envuelven toda la trama, destacando siempre este viento que a veces parece mecernos y en otros momentos es incontrolable.
Una fábula sobre el amor y los vínculos entre hermanas, valorando la importancia de la familia y los recuerdos, a la vez que también un hermoso homenaje a la lectura y al poder de la imaginación. Un extraño cruce que evoca la fantasía más pura de Miyazaki con talento europeo, una película hecha para disfrutar y dejarse llevar por el viento.
Título: Sirocco y el reino de los vientos.
Título original: Sirocco et le royaume des courants d’air. Dirección: Benoît Chieux.
Directora de animación: Susanne Seidel.
Voces originales: Maryne Bertieaux, Aurélie Konaté, Pierre Lognay, Loïse Charpentier, Laurent Morteau, Eric De Staercke, David Dos Santos y Géraldine Asselin. Género: Animación, Infantil, Fantástico, Aventuras.
Calificación: Apta para todo público.
Duración: 74 minutos. Origen: Francia/ Bélgica. Año de realización: 2023.
Distribuidora: Lupino Films. Fecha de estreno: 20/02/2025.
Puntaje: 9 (nueve)