Por Pablo E. Arahuete
Antes de partir, del director Rob Reiner, es una mezcla de Extraña pareja con Las invasiones bárbaras. Un simple producto de explotación de la sensibilidad del espectador, sin ideas ni reformulaciones de ningún tipo, que deja en manos de sus dos protagonistas un guion automático con reflexiones y frases sentenciosas. El trago amargo se multiplica al tratarse de esas “dramedys” aplicadas con proyecciones didácticas sobre cómo encontrar la felicidad y saldar las deudas morales antes de morir. Y para eso qué mejor idea de unir a un viejo rico y cínico (Jack Nicholson) con un pobre mecánico que debió postergar una vida de universitario para mantener a su familia (Morgan Freeman). Ambos se conocen en la clínica privada y reciben la noticia de un cáncer terminal. De ahí la alternativa de aprovechar hasta el último minuto en vez de agonizar en una fría habitación rodeados de tubos y aparatos concretando aquellos deseos postergados que forman parte de una lista. Para fortuna del pobre mecánico, su compañero de cuarto es un multimillonario y entonces cumplir con los ítems de la lista es tan fácil como anticiparle los tics a Nicholson durante el metraje.
Al film, en sí, no le faltan esos –obligados- buenos momentos esperables entre actores de la talla de Freeman y Nicholson, que en este caso cristalizan en un intercambio mutuo de aprendizajes bajo el tono confesional que define la cadencia narrativa de la película. Y a la vez, esta dinámica da la pauta de que estos dos monstruos de la actuación pueden sacar adelante esto y mucho más con muy poco esfuerzo; demasiado poco diría para el dineral que deben cobrar por sus respectivos desempeños. Y quizás allí se “justifique”, desde el punto de vista de los costos de producción, el decepcionante artificio de las imágenes digitales en un intento de recreación de locaciones para ahorrarse unos cuantos miles de dólares en viajes por Egipto, India, un safari en África o el mismísimo Himalaya; lugares nunca visitados realmente por los actores.
A Rob Reiner lo salvan el prestigio de viejas perlas como Cuenta conmigo o la entrañable This is spinal tap, pero tales consagraciones no son suficientes cuando es evidente su desgaste y condescendencia de aquello que Hollywood predica como letra sagrada. La misma que encasilla a Morgan Freeman y le pide lo mismo de siempre -incluido el relato en off- o deja que Jack Nicholson luzca su locura suspendido a miles de metros en un paracaídas.
Título: Antes de partir.
Título original: The bucket list.
Dirección: Rob Reiner.
Intérpretes: Jack Nicholson, Morgan Freeman, Sean Hayes, Rob Morrow, Beverly Todd, Alfonso Freeman, Rowena King, Serena Reeder, Hugh B. Holub, Karen Maruyama.
Género: Drama, Comedia.
Calificación: Apta mayores de 13 años.
Duración: 97 minutos.
Origen: EE.UU.
Fecha de realización: 2007.
Distribuidora: Warner Bros.
Fecha de estreno: 07/02/2008.
Puntaje: 4 (cuatro)
El staff opinó:
–Mi razonamiento antes de ver Antes de partir (valga la maldita redundancia) fue: -Jack Nicholson (probablemente haciendo de “Jack”) y Morgan Freeman (probablemente haciendo de “Morgan Freeman”) juntos, ambos diagnosticados con cáncer terminal y saliendo a “romper” lo que les queda de vida en el último “intento cinematográfico” de Rob Reiner… ¿acaso es una especie de broma..??-. Y mi conclusión “a posteriori” fue: -¿ehh…???– Juan Blanco (3 puntos)
–El viejo y querido Jack continúa escribiendo su testamento fílmico de la mejor manera posible: con una sonrisa. Una pequeña película sobre un gran tema. La química entre Nicholson y Freeman está a la orden. Buenos diálogos, correcta dosificación de golpes bajos y un trabajo minúsculo por parte de Rob Reiner. Humilde y certera.- Emiliano Fernández (6 puntos)
