Por Pablo E. Arahuete
Furtivo, ópera prima de Nicolás León Tannchen (colaborador de Martín Retjman), viene a cerrar en materia de cartelera porteña un año complicado para el cine argentino que avizora un 2009 bastante incierto (piénsese que el primer estreno nacional de enero será la hiper comercial Ratón Pérez 2). Quizá por reflejo o por resonancia se estén experimentando en el panorama local los embates de una crisis que comenzó en el 2001 cuando muchos proyectos fueron encerrados por un corralito de contingencias o simplemente sepultados en los anaqueles del INCAA -los anuncios de nuevos subsidios para el cine nacional despiertan en quien escribe una saludable dosis de escepticismo-, cuya perspectiva resulta preocupante para los tiempos que se avecinan. Así de incierta y caótica aparece la película de Tannchen, como los resabios de una comedia romántica que se contagió del panorama angustiante de aquel año nefasto, hasta el punto de perderse en un noble intento por reflejar un estado de ánimo y una realidad que por lo general encontró un espejo deformante en los primeros proyectos del nuevo cine argentino.
Furtivo es un ramillete de ideas en las agitadas aguas de un océano de incertezas; una oda a la impotencia de no poder concretar los deseos y, en un segundo nivel, una radiografía casi exacta de un grupo de jóvenes (veintitantos años) que ya podría denominarse como la generación rota. Rotos de esperanzas, muchos como Pablo (Pablo Pérez, debut aceptable) atraviesan las crisis personales junto a las colectivas o por lo menos eso se trasluce en los pasajes que el realizador extrajo, en un registro cuasi documental, de la geografía urbana. Aquellas acaloradas tardes donde el microcentro se transformó en un desfile de rostros preocupados y las colas de los consulados para emigrar desbordaban de cuerpos, malhumor y desesperación. Allí, también a la deriva, Pablo intenta encontrar un trabajo; acompañar a su amigo dispuesto a marcharse a Italia; encontrar a la mujer de su vida y convencerse de que todavía vale la pena seguir en Argentina. Cualquier similitud con la actualidad es mera coincidencia… ¿o será como en la vida de Pablo que en este país nada cambia?
Tannchen logra con cierta melancolía y algunos raptos fugaces de humor adentrarse en las fibras más sensibles de sus criaturas pero quizá en su afán de abarcar mucho aprieta poco y eso se nota en algunos tramos del film donde parece no saber cómo seguir, así como en el abuso del monólogo interior para complementar las indecisiones de su protagonista. No obstante, por tratarse de una ópera prima, son más los aciertos que las imprecisiones.
Título: Furtivo.
Título original: Idem.
Dirección: Nicolás León Tannchen.
Intérpretes: Pablo G. Pérez, Marcelo De Bellis, Luciana Tapia, Diego Sosa, Sandra Flomenbaum, Daniela Szlak y Máximo Tannchen.
Género: Comedia, Drama, Romance.
Calificación: Apta mayores de 13 años.
Duración: 82 minutos.
Origen: Argentina.
Año de realización: 2008.
Distribuidora: Cinemagroup.
Fecha de estreno: 11/12/2008.
Puntaje: 6 (seis)