Título: Generación Artificial
Dirección: Federico Pintos
Clasificación: Apta para mayores de 13 años
Duración: 62 minutos
Género: Documental, Ensayo, Sy fy
Distribuidora: Independiente
Origen: Argentina
Intérpretes: Lolo Armendaríz, Rafael Cippolini, Alejandro Delgado
Año de realización: 2015
Fecha de estreno: 03/03/16
Se exhibe en el MALBA todos los viernes de Marzo a las 22 horas.
Puntaje: 8 (ocho)
Por Pablo Arahuete
Generación artificial es un híbrido y como en todo híbrido la experimentación juega un papel importante. Ahora bien, la mezcla entre falso documental y repaso ensayístico sobre la evolución del videoarte concentrado en las figuras de los VJs, quienes manipulan imágenes en vivo, forma parte de uno de los ejes que atraviesa el particular universo de este opus presentado en BAFICI y en donde su creador Federico Pintos expone el artificio y juega con las posibilidades de la representación y los límites.
Quienes aparecen en pantalla como personajes están vinculados de cierta manera con el videoarte, pero la persona encargada de interpretar a Federico Pintos es el curador Rafael Cippolini, sumergido en una aventura que tiene por objeto dar con el paradero de un extraño y misterioso personaje que a base de experimentos con las imágenes ha logrado conectar el cerebro con los videos.
Es evidente que detrás del título Generación Artificial se esconde por un lado cierta nostalgia desde la palabra “generación”, que puede terminar entendiéndose a lo largo de todo el metraje en donde se demuestra la evolución de la tecnología a partir de las imágenes y el montaje, pero por otro, lo “artificial” puede remitir a la inteligencia artificial como modelo futuro de distopía.
Hasta donde es capaz de llegar el hombre cuando la ciencia invade los campos de la ética es una pregunta que Federico Pintos no realiza de manera explícita pero que puede entretejerse en ciertas respuestas siguiendo la mínima ficción que atraviesa el falso documental.
Un trabajo muy meticuloso en la selección de imágenes y montaje, el uso de muchos formatos y cámaras evidencian todo el trabajo detrás de este proyecto que también expone su proceso de construcción constante desde el documental dentro del documental, claro que de antemano es notorio el carácter del artificio en contraste con los testimonios reales de protagonistas que entrelazados generan ambigüedad en la trama.
Generación Artificial se luce por su propuesta radical y cercana al ensayo, apela al recurso de la voz en off para enfatizar el juego entre realidad y ficción aunque más allá de eso el meta discurso o la meta narración se abre por capas y permite entrar a la historia desde diferentes puntos de vista.
Uno de los méritos de este original film es no caer en el trillado mecanismo de la ironía o de la pose o impostura crítica ante determinado discurso cinematográfico, sino por el contrario, encontrar desde el propio material el momento para el humor o para la reflexión por los distintos tópicos que surgen en el proceso de creación.