Por Juan Blanco
No se trata tan sólo de considerar a Tiempo de Valientes como un buen intento de hacer cine de género o industrial en un país en el que no existe una industria cinematográfica; aunque el filme lo sea y lo manifieste a lo largo de sus casi dos horas de duración. De hecho, para este segundo opus de Damián Szifrón la frase popular y bastarda “…para ser nacional la película está bien…” no serviría más que como un insulto. Tiempo de Valientes es ciertamente una anomalía dentro de la filmografía argentina (no sólo por lo que intenta sino por lo que concreta), pero más allá de eso es una gran película.
En esa famosa línea de las buddy movies (películas de pareja despareja) que mezclan policial y acción con comedia, prácticamente inventada, patentada y llevada a su máxima expresión por los norteamericanos con títulos como Arma Mortal, 48 Horas, El Último Boy Scout y miles más, Szifrón se sintió tan a gusto como para conseguir entregar una aventura con identidad propia (e inteligentemente localista), más allá de estos códigos quizás más reconocibles dentro de otras filmografías. Su afición confesa por el cine americano y su evidente conocimiento y comprensión de muchas de sus fórmulas (algo además palpable en su anterior filme, El Fondo del Mar, y en su creación televisiva Los Simuladores) hizo posible no sólo la solidez de la propuesta como película de género sino además esa astucia intertextual que Tiempo… presenta dentro del estilo en que se inscribe (atender por ejemplo al empleo del típico leitmotiv de Spaghetti Western en la banda sonora), y que hace al espectador reconocer que aquello ya tantas veces visto fue considerado por su cinéfilo guionista- director al momento de contar lo que se ve en pantalla. Y es a partir de esta auto-conciencia que Szifrón construye una historia tan convencida de sí misma como acertadamente satírica (y también homenajeadora) hacia los elementos que la excusan, sin por ello atentar contra la credibilidad de la anécdota o de los personajes.
Sobre éstos últimos, se puede decir mucho más de lo que conviene anticipar (no por sorpresas que pueda deparar la película sobre ellos, sino por el encanto que hace a enterarse de los detalles durante la proyección). Diego Peretti interpreta -a su genial y comiquísima manera- a un psicoanalista atrapado en una ronda de trabajo con el oficial de policía Alfredo Díaz, jugado con soberbia (en el sentido más glorioso del término) por Luis Luque, quien acaba de descubrir a su esposa en un amorío con otro tipo y se encuentra totalmente desmoralizado. El tema es que el Dr. Silverstein (Peretti) debe cumplir una sentencia de servicio comunitario, y por ello saldrá forzosamente a patrullar con Díaz para tratar de ayudarlo a superar su trance. Aunque lo que Silverstein no sospecha es que, además de estar a punto de involucrarse más de lo prudencial en el universo policial, podría ser su accidental compañero quien termine ayudándolo a él en el plano emocional, y mucho más de lo que se imagina.
Sin dudas Tiempo de Valientes no sería lo que es sin dos actores de la talla de Peretti y Luque. Dos monstruos capaces de cargarse al hombro tanto instancias joviales como densas con igual capacidad de resolución; sin importar las circunstancias, se los ve y se los cree humanos, y en parte la película les debe a ellos toda la simpatía y eficacia que hacen del obligado disfrute de uno de los filmes más entretenidos del año.
Después de unos no tan prolijos primeros diez o quince minutos en los cuales la película trata con esfuerzo de acomodar y encausar el relato, Tiempo de Valientes arranca con todo y no afloja hasta que se encienden las luces de la sala. El timing es tan perfecto, el humor tan infalible y la acción tan precisa como para hacernos sentir orgullosos de tener a un director valiente como Damián Szifrón entre nosotros intentando lo que muchos no se atreven… y lo que es mejor aún, logrando su cometido.
Título: Tiempo de valientes.
Título Original: Idem.
Dirección: Damián Szifrón.
Intérpretes: Diego Peretti, Luis Luque, Oscar Ferreiro, Gabriela Izcovich, Martín Adjemián, Tony Lestingi, Carlos Portaluppi, Ernesto Claudio, Daniel Valenzuela y Antonio Ugo. Género: Acción, Comedia, Crimen. Clasificación: Apta mayores de 13 años con reservas. Duración: 112 minutos. Origen: Argentina.
Año de realización: 2005.
Distribuidora: Fox. Fecha de Estreno: 29/09/2005. Estreno en Netflix con copia en 4K: 06/07/2022.
Puntaje: 9 (nueve)