La cinematografía es un arte todavía joven, pero su precoz influencia en la cultura ha originado un subgénero que se ocupa de reflexionar sobre los límites existentes entre la ficción y la realidad. Se trata, claro está, del generalmente interesante y a veces forzado recurso del cine dentro del cine. Irma Vep –anagrama de vampire- es un estreno que llega a la cartelera porteña con siete años de atraso, aunque avalado por el prestigio de Olivier Assayas, un realizador de vasta experiencia que cuenta además con el antecedente favorable –por lo menos ante los ojos de cierto periodismo “bienpensante”- de haber sido editor y crítico de la célebre revista Cahiers du Cinéma desde 1980 hasta 1985. Assayas se vale de su conocimiento del medio para elaborar una comedia mordaz, ácida y querible al mismo tiempo, que alude un tanto oblicuamente a La noche americana (1973) del genial François Truffaut, inspiración evidente por varios motivos.
La trama de Irma Vep es muy leve: René Vidal, director cuyas ínfulas artísticas son morigeradas por una crisis personal que afecta su trabajo, es tentado para filmar por encargo una remake de Les vampires, una serie muda muy popular a comienzos del siglo pasado. Como Vidal descree de su capacidad para llevar a buen puerto este proyecto, les dice a los productores que no hay una actriz francesa factible para el rol de la protagonista, Irma Vep, y propone como condición sine qua non para aceptar el ofrecimiento que contraten a la intérprete hongkonesa Maggie Cheung (quien hace de sí misma). Por absurdo que esto parezca, los productores acceden! La bella Maggie llega a París sin hablar ni una palabra en francés y trata de cumplir con los pedidos de Vidal, que se comunica con ella en inglés. A medida que avanza el rodaje la salud mental del director se va deteriorando cada vez más, mientras el descontento envuelve al equipo técnico tornando cada día en un pequeño infierno. Maggie Cheung es el asombrado testigo de este descontrol emocional, la única dotada con una cuota de imparcialidad mínima que, por cierto, representa el punto de vista del público. No se busque mucho más en el plano argumental porque no lo hay. Pero no importa, Olivier Assayas no necesita más que eso
para establecer un sabroso contrapunto entre las relaciones humanas y la industria cinematográfica. En esto el hombre es sencillamente brillante porque sabe de lo que habla y denota sensibilidad para servirlo de la mejor manera.
Uno de los lazos que une a Irma Vep con La noche americana es la presencia del actor fetiche de Truffaut, Jean-Pierre Léaud (¿quién puede olvidarse de su consagratorio Antoine Doinel en la fundacional Los cuatrocientos golpes?). En la obra maestra del creador de Jules et Jim, Léaud se puso en la piel de un artista joven tan egocéntrico como chiquilín que le complicaba la vida a su director (encarnado por el mismo Truffaut). En Irma Vep, guiño cinéfilo mediante, es Léaud el maduro cineasta estresado por sus propios demonios internos. Aquí terminan las comparaciones, porque las dos obras manifiestan personalidades muy dispares. Truffaut siempre fue un sentimental y como tal volcó esa emoción en toda su filmografía. Olivier Assayas, en cambio, prefiere no encariñarse con sus personajes, que son creíbles y hasta fascinantes en ocasiones pero fríos; tan fríos…
Las observaciones filosas de Irma Vep seguramente serán mucho más apreciadas por gente vinculada al cine que por el espectador común. Los que odiaron a State & Main, de David Mamet, tendrán un título flamante para su lista negra. Los demás, y me estoy incluyendo, podrán gozar de un relato intelectualmente provocativo, muy bien actuado, y estéticamente cercano al registro documental en su intento por aprehender la magia de este séptimo arte al que tanto queremos… Irma Vep pregona ese amor en todos sus fotogramas. ¿Cómo podría ser mala una película así?
Título: Irma Vep.
Título Original: Idem.
Dirección: Olivier Assayas.
Intérpretes: Maggie Cheung, Jean-Pierre Léaud, Nathalie Richard, Nathalie Boutefou, Dominique Faysse, Bernard Nissile, Olivier Torres y Bulle Ogier.
Género: Comedia, Drama.
Clasificación: Apta para mayores de 16 años.
Duración: 99 minutos.
Origen: Francia.
Año de realización: 1996.
Distribuidora: Good Movies.
Fecha de Estreno: 31/07/2003.
Puntaje: 8 (ocho)
