Por Emiliano Fernández
El público infantil/adolescente contemporáneo no consume con mucho agrado la saga de Star Wars. Las causas pueden ser muchas, empezando por la desinformación y terminando por las diferencias generacionales. Aún así, a ellos va dirigida The Clone Wars (2008), un intento por parte de Lucasfilm Ltd. para ganarse un sector que le ha sido un tanto esquivo 
históricamente. Hay que reconocer que sólo los curiosos y los fans acérrimos se acercarán a las salas para ver un largometraje animado de 98 minutos que en términos prácticos no cuenta con la presencia de George Lucas. Lo único que debe haber hecho es pasar por la puerta del estudio, saludar al equipo técnico y levantar el pulgar en signo de aprobación.
La acción se desarrolla teniendo por contexto los hechos narrados entre el Episodio II (2002) y el III (2005). Genera algo de vergüenza ajena relatar de qué va este nuevo eslabón. En medio de las guerras clónicas entre la República Galáctica y los Separatistas, un grupo renegado desconocido secuestra al hijo de Jabba The Hutt y pone en jaque la endeble alianza entre los Jedi y el clan de los Hutts. Si no lo recuperan pronto y descubren el misterio detrás de la abducción, el todopoderoso Jabba le negará a la República el paso por sus dominios, lo que podría llevar a una eventual derrota en el conflicto. Así las cosas, Obi-Wan Kenobi y Anakin Skywalker se enfrentarán a las estratagemas políticas de turno.
The Clone Wars es el típico producto televisivo que no se sostiene desde el punto de vista cinematográfico. Viéndolo en cable, la cosa cambiaría mucho y hasta pasaría por una propuesta prolija aunque poco inspirada. De hecho, los gráficos en 3D son similares a los de los mejores video juegos de la factoría del californiano. Pero la historia es más que deficiente, está plagada de diálogos escuálidos y apenas si funciona como una simple colección de batallas, una detrás de la otra y sin demasiada coherencia. Dejando de lado el eje del relato, el hilarante secuestro, llama la atención que llegue a la pantalla grande una obra tan limitada, carente de ideas novedosas y con un paupérrimo desarrollo de personajes.
Los tres “Episodios” que dirigió Lucas entre finales de los ’90 y mediados de la presente década fueron realizaciones polémicas por varias razones. En lo referido al tema, muchos sólo vieron previsibilidad por la misma condición de precuelas y no percibieron el centro de
la cuestión: se estaba narrando con todas las letras la construcción de una dictadura. La mayoría se dio cuenta de este “detalle” recién con la llegada del Episodio III (clásico medio pelo de cierto sector de la crítica, tan ignorante como holgazán). Desde la perspectiva formal, las películas carecían del “espíritu artesanal” de las originales y abrazaban de manera brutal los últimos adelantos en animación (el señor siempre fue un gran tecnócrata).
Sin embargo, aquellos films estuvieron bastante bien para alguien que disfruta muchísimo más de las tareas de post- producción que del contacto con seres humanos. A su favor parece que siempre debemos recordar que el cineasta en su juventud era diferente: THX 1138 (1971), American Graffiti (1973) y la primera Star Wars (1977) dan testimonio al respecto. El formalismo más extravagante y el desistieres por los actores no tienen nada de malo, siempre que estén acompañados por una ambición argumental acorde con la grandilocuencia de la puesta en escena. Lucas por suerte defiende esta posición, más allá de algunos traspiés. The Clone Wars es una consecuencia menor surgida de esta concepción; la misma que puede caer en soluciones facilistas como la “revolución digital”, una revuelta transitoria que desea obnubilarnos visualmente al tiempo que nos vacía de todo contenido.
Título: Star Wars: The Clone Wars.
Título original: Idem.
Dirección: Dave Filoni.
Voces (en inglés): Matt Lanter, Ashley Eckstein, Ian Abercrombie, Samuel L. Jackson y Christopher Lee.
Género: Animación, Ciencia-ficción, Aventura.
Calificación: Apta todo público.
Duración: 98 minutos
Origen: EE.UU.
Año de realización: 2008.
Distribuidora: Warner Bros.
Fecha de estreno: 14/08/2008.
Puntaje: 4 (cuatro)
