Por Pablo Arahuete
Con tan sólo cinco filmes en su haber el realizador François Ozon se convirtió en poco tiempo en un referente obligado del actual cine galo. Si bien acá se estrenaron cuatro de sus obras alcanza para identificar ciertos rasgos de su cine. La puesta en escena profundamente emparentada con el teatro es notoria en su comedia de intriga policial 8 mujeres; el cinismo y la provocación del público, en un in crescendo de misterios por revelar, resulta significativo en Bajo la arena, su film más oscuro, donde a partir del retrato de un personaje desaparecido se construye otro que lo busca desesperadamente.
En el caso de su último opus, La piscina, que cuenta con las memorables actuaciones de Charlotte Rampling y la sensual Ludivine Segnier, Ozon bordea el terreno de la novela policial y despliega una trama completamente alejada del género, cuyo eje central son las fantasías y fantasmas de una escritora, Sarah Morton, quien atraviesa un período de crisis. Tentada por su editor, Sarah acepta tomarse unas vacaciones en la casa de veraneo de aquél en Provence, al sur de Francia. Bajo el cálido sol del Mediterráneo y alejada de la
rutina seguro encuentre la inspiración para dar forma a su nueva novela, la saga del Inspector Dorwell. La calma se ve jaqueada cuando la imprevista llegada de la joven Julie, hija del editor, irrumpe en el lugar y la perturba. En una primera instancia, Julie representa todo aquello que Sarah no es: desordenada, impulsiva, desinhibida y promiscua. Se transforma de inmediato en la antagonista perfecta.
Sin embargo, la rivalidad entre las dos mujeres comienza a diluirse y se abre un juego erótico entre ambas. Sarah agita sus fantasías mientras observa a Julie y a partir de la ruptura de su propio prejuicio la convierte en personaje de su novela. Como en un sistema de espejos deformantes, realidad y fantasía se fusionan en un relato al servicio de la ambigüedad, la incertidumbre y la complicidad del espectador. Ozon demuestra capacidad para llevar de las narices al espectador pero lamentablemente recurre a un final explicativo, de esos que atan cabos sueltos y desvirtúan el artificio. Más allá de este desacierto, el film de Ozon resulta inquietante.
Título: La piscina.
Título Original: Swimming pool.
Dirección: François Ozon.
Intérpretes: Charlotte Rampling, Ludivine Sagnier, Charles Dance, Marc Fayolle, Michel Fau, Jean-Marie Lamour, Mireille Mosse, Jean-Claude Lecas, Sebastian Harcombe, Erarde Forestali, Emilie Gavois-Kahn y Lauren Farrow.
Género: Drama, Crimen, Misterio.
Clasificación: No disponible.
Duración: 102 minutos.
Origen: Francia/ Reino Unido.
Año de realización: 2003.
Distribuidora: Alfa Films.
Fecha de Estreno: 08/07/2004.
Puntaje: 7 (siete)
