Por Alan Prince
Po regresa luego de su última aventura en 2016, esta vez debiendo dejar su título de Guerrero Dragón y buscar a una sucesora pero las cosas se complican con la llegada de Camaleón, una oponente cambiaformas.
Veamos, DreamWorks es un estudio que logró hacerse de una variedad de franquicias como lo son Shrek y Madagascar, pero con Kung Fu Panda o Cómo entrenar a tu dragón lograron una saga mucho más sólida. Sin embargo, hay una debilidad presente. Si en los ’80s teníamos los estigmas de las segundas partes, hoy las cuartas llenan ese hueco. Con Shrek para siempre (2010) pudimos presenciar el desgaste en su estado puro. Ahora, con Kung fu Panda 4 (2024)… ¿lo vemos?
Para empezar, tenemos un repaso de las películas anteriores, con la reivindicación de algunos personajes, algo que se agradece, así como el talento sin igual de Jack Black como Po, pero el personaje por sí solo, pese a tener ya algunas series centradas en él, no puede obrar milagros.
Por otro lado, nos presentan el argumento trillado del legado, discípulo, en este caso, la zorra Zhen, con la voz de Awkwafina. No es la primera vez que veo una premisa así y conociendo la historia de cómo surgió DreamWorks y su rivalidad pública con Disney, me remite directamente a Cars 3 (2017), donde de golpe el protagonista se retiraba de las pistas.
Kung Fu Panda 4 representa un momento bisagra y me cuesta imaginar que pueda continuarse con un par de películas más. Querer cambiar de personaje con el solo hecho de ampliar la historia podría ser un gran error, por lo que no me molestaría verlo a Po cerca pero lejos a su vez.
Las modificaciones que presenta el filme de Mike Mitchell y Stephanie Stine dejaron sin minutos de pantalla a los personajes clásicos que acá resultaron sumamente afectados en aras de introducir a nuestra próxima protagonista y su respectiva antagonista. El maestro Shifu y los cinco furiosos, los personajes más carismáticos de la saga, fueron rebajados a breves apariciones como si el estudio tuviera la certeza que estamos hartos de ellos… lo que no es verdad.
En cambio, si hay algo en lo que la película no falla en lo absoluto es en la calidad de la animación: se nota una descomunal mejoría comparada con su última entrega, mostrándonos una serie de cambios de estilo de animación y un CGI mucho más refinado. Acá tenemos un punto infalible, que agradezco que no haya sufrido como les pasó a otras producciones del estudio.
Con lo bueno y lo malo que mencioné, a Kung Fu Panda 4 no la siento tan innecesaria aunque tampoco me termina de convencer del todo eso de creer que los personajes principales pueden ser desplazados. Históricamente, no conozco personaje que haya salido bien parado en ese intento.
Un chico de primaria la va a disfrutar más que un adulto, eso es seguro. Y no sé si es el camino que me gusta de DreamWorks donde la balanza antes era más equitativa entre públicos.
Título: Kung Fu Panda 4.
Título original: Idem.
Dirección: Mike Mitchell & Stephanie Stine.
Voces en inglés: Jack Black, Awkwafina, Viola Davis, Dustin Hoffman, James Hong, Bryan Cranston, Ian McShane, Ke Huy Quan.
Género: Animación, Comedia, Aventura, Familia.
Calificación: Apta para todo público.
Duración: 94 minutos.
Origen: EE.UU.
Año de realización: 2024.
Distribuidora: UIP.
Fecha de estreno: 07/03/2024.
Puntaje: 6 (seis)