A pocas horas de darle la bienvenida a un nuevo año cargado de expectativas por las próximas producciones del séptimo arte, te invitamos a conocer nuestro resumen con lo más destacado del 2017.
Por Giuliana Bleeker
Grandes estrenos
El año arrancó con una de las preferidas de la Academia, el musical romántico La La Land, protagonizado por Emma Stone y Ryan Gosling. La película dirigida por el joven Damien Chazelle (Whiplash), rinde homenaje a los clásicos musicales de la época dorada de Hollywood al mismo tiempo que nos regala una reflexión sobre el duro camino de la persecución de los sueños en una ciudad donde, a simple vista, todo parece posible.
La actriz francesa Isabelle Huppert supo deslumbrarnos con su interpretación en la controvertida Elle: Abuso y Seducción, de Paul Verhoeven (Bajos Instintos). Estrenada en Argentina casi un año más tarde, la película retrata de forma inteligente la actitud de una mujer violada que se niega a ser una víctima. La personalidad fría y hermética de Michelle es representada por una soberbia Huppert que no demuestra ningún temor al aceptar este tipo de papeles arriesgados.
Entre las sorpresas del 2017, nos encontramos con un vertiginoso filme del director Edgar Wright que se destaca por su mixtura de géneros, originalidad y unas brillantes escenas de acción. Hablamos de Baby: El Aprendiz del Crimen, el proyecto más ambicioso de la carrera de Wright que le llevó nada menos que 20 años para que saliera a la luz. Con un Ansel Elgort que derrocha frescura en su papel de protagonista absoluto, esta película es una joya impensada para las historias de atracos y una fiel candidata a convertirse en película de culto. La sincronización perfecta entre lo visual y una banda sonora explosiva.
Otra agradable sensación de asombro es la que nos ha dejado Okja, una película original de Netflix. La plataforma de streaming presenta esta historia tan bella como cruda, que tiene como trasfondo la explotación animal bajo el sistema capitalista. Cuenta con una fotografía idílica y una actuación conmovedora de parte de la pequeña actriz coreana Seo-Hyun Ahn.
Y como no podría ser de otra manera, el año se despide con el regreso de la saga más trascendente de la cultura pop: Star Wars: Los Últimos Jedi. El estreno del episodio VIII ha devenido en una verdadera guerra entre los fanáticos del universo de George Lucas. El sello propio que el director Ryan Johnson (Looper) plasmó sobre la secuela de El Despertar de la Fuerza no fue muy bien recibido y la exacerbada cuota humorística de Disney acrecentó la polémica. A pesar de las incoherencias y la ridiculización de algunos personajes míticos, no podemos dejar de resaltar los magistrales efectos visuales, fotografía, las batallas espaciales y las reflexiones sobre el bien y el mal que traspasaron los márgenes de esta épica aventura. Un entretenimiento con giros inesperados que en ningún momento osa perder el ritmo.
De la historieta al celuloide: Los superhéroes que pisaron fuerte en 2017
Finalmente, y después de 75 años de historia, la heroína más popular de los cómics tuvo su merecido retrato en pantalla grande. Wonder Woman se consolidó como un rotundo éxito y Gal Gadot brilló en uno de los roles más difíciles de interpretar. Definitivamente, la propuesta de Patty Jenkins (Monster) llegó para sacarle las papas del fuego a un DC que venía en picada luego de las defectuosas Batman v Superman y Escuadrón Suicida. La película que está ambientada durante la Primera Guerra Mundial nos muestra la infancia y adolescencia de la amazona en la isla y su primer acercamiento al mundo de los humanos. Un relato lleno de valores, dramatismo, peleas increíbles en cámara lenta y el carisma contagioso de la princesa Diana que, junto al personaje de Chris Pine, demuestra tener verdadera química.
Con el público familiar a su favor y a la espera de lo que será el épico encuentro de los superhéroes más venerados en el estreno de Vengadores: Infinity War, el Universo Cinematográfico de Marvel también se ha lucido este año.
El equipo de looser de Guardianes de la Galaxia Vol. 2 volvió a fascinar a los jóvenes (y no tan jóvenes) con sus impresionantes efectos especiales, el humor gamberro y las referencias a la cultura pop de los ‘80. James Gunn decidió esta vez profundizar en el pasado de los protagonistas y su relación como equipo. Al igual que en la primera, la BSO se destaca como uno de los aspectos centrales del filme.
Spider-Man: De Regreso a Casa nos ofreció una versión más adolescente y menos dramática del vecino amistoso, con un Tom Holland que se roba la película y que, con el perdón de nuestro querido Tobey Maguire, representa el Spider-Man que siempre quisimos ver en pantalla. Inspirado en ficciones de instituto como la serie de culto Freaks & Geeks, el cineasta Jon Watts optó por un tono ligero y la presencia de un villano con motivaciones más terrenales. Créditos finales bien al estilo Marvel y con música de los Ramones.
Por último, tuvimos el placer de ser testigos del emotivo final del X-Men con el que Hugh Jackman nos sorprendió hace 17 años. Logan se despidió de la pantalla grande no sin antes regalarnos una aventura llena de tensión en la que conocimos a Laura, una pequeña pero poderosa mutante que será un faro de esperanza para la nueva generación.
Cine argentino
Un 2017 más que favorable para las producciones cinematográficas locales. Pese al conflicto entre el sector audiovisual y el oficialismo que, entre otras cosas, llevó a la renuncia del presidente del INCAA Alejandro Cacetta y de Pablo Luis Rovito, rector de la ENERC, hemos tenido la fortuna de apreciar cintas de gran calidad visual y narrativa. Durante el primer semestre la cartelera nos regaló títulos como El Otro Hermano, un thriller de Adrián Caetano, El Peso de la Ley, ópera prima del actor Fernán Mirás, la exitosa Nieve Negra con el siempre convocante Ricardo Darín, la comedia Casi Leyendas, Los Padecientes, que se ubica entre las cinco cintas nacionales más vistas, Maracaibo con el dúo dinámico Jorge Marrale-Mercedes Morán e Hipersomnia de Gabriel Grieco, uno de los pocos filmes dentro del género de terror que aterrizaron en las salas comerciales.
El mayor éxito vino de la mano de Ariel Winograd con su nueva comedia familiar Mamá Se Fue de Viaje, protagonizada por Diego Peretti. La película tuvo su estreno a principios de julio y llegó a vender más de 1.675.000 entradas, siendo el filme argentino más visto del año. Otra comedia que supo llamar la atención de los espectadores en vacaciones de invierno fue El Fútbol o Yo, que gracias al liderazgo de Adrián Suar– uno de los tres actores más taquilleros del país junto con Francella y Darín- quedó en segundo puesto con 1.094.812 entradas vendidas.
La Cordillera de Santiago Mitre también se consagró como una de las cintas más populares de la segunda mitad del año. El primer thriller político argentino contó con nada más y nada menos que Ricardo Darín interpretando al presidente de la Nación. Por último, no podíamos dejar de destacar el ansiado regreso de la directora Lucrecia Martel con Zama, la película conceptual basada en la novela de Antonio Di Benedetto que fue seleccionada para competir por los Premios Oscar.
El rey del terror, más vigente que nunca
Las adaptaciones de las obras del prolífico Stephen King siguen siendo un desafío para aquellos cineastas amantes de las historias del maestro. Sin dudas, este ha sido un año en que tanto la TV como la pantalla grande se propusieron rendirle homenaje a aquellas novelas de terror que se convirtieron en clásicos. Lamentablemente, no todos contaron con la misma suerte.
La versión cinematográfica de la saga de libros de La Torre Oscura fue un eminente fracaso de taquilla y los críticos no perdieron oportunidad de destrozarla. Con solo un 16% de aceptación en Rotten Tomatoes, el mundo fantástico y post apocalíptico que King comenzó a tramar en 1982 quedaba destrozado en 95 minutos de filme. Habrá que aguardar a que un director como J.J. Abrams se anime a revivirla algún día.
Las cosas funcionaron en sentido radicalmente opuesto para IT, la última versión del payaso maldito. De la mano del argentino Andy Muschietti (Mamá), el filme se transformó en todo un fenómeno popular, logrando la aceptación de un fandom tan exigente como son los lectores de King. Ambientada en los 80, esta primera parte de IT rescata la atmósfera característica de la novela y se toma el tiempo necesario para desarrollar los miedos más profundos de los cinco chicos de El Club de los Perdedores. A pesar de no ser una adaptación totalmente fiel y del abuso de los jump scares, supera con creces a la miniserie de los 90 y el Pennywise de Bill Skarsgard es un verdadero deleite visual.
Por otro lado, la plataforma de Netflix también decidió sumarse al aluvión de versiones del rey del terror con el estreno de dos películas originales: El Juego de Gerald y 1922. La primera es una adaptación de la novela homónima de 1992 y la segunda pertenece a uno de los relatos cortos del libro Todo Oscuro, Sin Estrellas (2010).
Dirigida por Mike Flanagan (Ouija: El Origen del Mal), El Juego de Gerald demuestra que no se necesitan grandes inversiones de dinero para hacer una película consistente, inquietante y fiel a la obra de King. Con un solo escenario durante casi toda la cinta, Flanagan logra que la protagonista exprima toda la tensión necesaria en esta seductora historia que combina alucinaciones con recuerdos secretos.
En el caso de 1922, ésta sigue la vida de un granjero que con la ayuda de su hijo adolescente decide asesinar a su esposa. Una historia sencilla y poco innovadora, pero con una sólida actuación de Thomas Jane que se encuentra entre lo mejor de su carrera.
