Por Pablo Arahuete
Ata tu arado a una estrella, el nuevo opus de la realizadora documentalista Carmen Guarini resume en cierta manera la multiplicidad de significados y significantes enmarcados en la figura del maestro de maestros Fernando Birri. Batallador incansable de utopías, hacedor de conciencias y fundador de escuelas de cine como la de Santa Fe o aquella de San Antonio de los Baños en Cuba. La palabra de Birri y su pensamiento en acción a partir del pretexto de acompañarlo mientras trabaja es la principal herramienta que Carmen Guarini empleó para acercar una mirada distinta sobre Birri y su cine, sus últimos momentos y una larga entrevista fragmentada en años, décadas y mucha agua debajo del puente. Suficientes atractivos como para hacerle una entrevista y seguir indagando en el universo de Fernando Birri, en el valor de las utopías como faro y resistencia y por supuesto del cine como lugar para hacer posible lo imposible.
Fernando Birri era un creador que interrogaba el mundo con una mirada humanista y crítica.
Pablo Ernesto Arahuete: – En partes de tu documental se lo ve a Fernando Birri dialogando con campesinos en La Higuera ( Bolivia ) sobre la concepción o idea de Utopía en una especie de dialéctica símil mayéutica ¿Podríamos pensar a su cine como ese diálogo con la realidad y la obsesión por captarla sin nubarrones de la percepción?; ¿Qué descubriste sobre Fernando durante el rodaje que antes del reencuentro no conocías en lo que a su manera de trabajar y filmar se refiere?
Carmen Guarini: –Lo que descubrí es el profundo respeto y humildad con la que trataba a las personas que filmaba. Siempre en un mismo nivel de igualdad y además siempre con humor y sabiduría.
P.E.A.: – Qué te enseñó como documentalista y qué como artista?
Carmen Guarini: –No sé. Las influencias a veces no son fáciles de percibir. Debo decir que lo que más le admiré siempre es su eclecticismo y su libertad hacia el arte. Esa forma de anarquía creativa que le permitía expresarse en múltiples formas.
se instalan con fuerza ideas, sloganes no sólo falaces sino insólitos que significan en muchos casos un verdadero retroceso cultural, mental, político.
P.E.A.: – Al conocer tan de cerca a Birri y su forma de pensar ¿Era partidario de concluir verdades sobre ideas preconcebidas o un constante cuestionador de sus propios ideales?
Carmen Guarini: –Es muy difícil conocer a alguien. Pero me arriesgo a decir que lo interesante en él es que no me parecía muy adicto a las “verdades” absolutas. Para mi su mayor cualidad es que era un creador que interrogaba el mundo con una mirada humanista y crítica.
P.E.A.:- Si alguien quisiese saber algo sobre el fundador de la escuela de cine de Santa Fe y te pidiese un consejo de por dónde empezar ¿Cuál sería tu respuesta más amplia posible que abarcara a Fernando Birri sin reducirlo pero tampoco idealizarlo?
Carmen Guarini: –No soy de dar consejos pero sí le diría que vean sus películas. Y luego, que lean sus Lecciones de Stanford. O todo al mismo tiempo.
Las derrotas enseñan y son parte del vivir.
P.E.A.:- En épocas de post verdad ¿Cuál es el valor de los sueños?
Carmen Guarini: –Creo que estamos atravesando una época terrible, signada por la destrucción de valores que hasta hace poco nos parecían intocables. Asisto con estupor a la naturalización de la mentira en nuestra sociedad. Es algo inesperado, y como hoy eso baja desde el poder que controla los medios y la justicia, se instalan con fuerza ideas, sloganes no sólo falaces sino insólitos que significan en muchos casos un verdadero retroceso cultural, mental, político. Por pereza intelectual muchos prefieren dejarse convencer. Vivimos en lo que yo llamo “la patria zocalera”: hay personas que se conforman con repetir lo que dicen los zócalos en las pantallas de algunos canales de tv. Hay muchos que aún resistimos y ahí es donde las palabras de Birri resuenan y producen cierta tierna conmoción. Porque es la resistencia lo que nos da la fortaleza para cambiar el estado de las cosas.
P.E.A.: – ¿Alguna vez sentiste la derrota de tus Utopías a lo largo de tu carrera de cineasta o al menos la confusión frente al inexorable paso del tiempo?
Carmen Guarini: –En la vida no siempre lo que uno proyecta sale bien, más bien son más las veces que erramos. Pero aprendí con el tiempo que eso es también lo que te hace andar. Las derrotas enseñan y son parte del vivir.
P.E.A.: – ¿Qué legado deja Birri al cine latinoamericano y cuál es según tu opinión la manera más justa de homenajearlo?
Carmen Guarini: –Creo que el mayor legado de Fernando al cine latinoamericano fueron sin duda las escuelas que creó. No creía en los homenajes, tenía horror de esas cosas por eso llegó a romper su propia estatua en la escuela de San Antonio de los Baños. Y este es un mensaje claro, vale más que mil palabras.
Hay muchos que aún resistimos y ahí es donde las palabras de Birri resuenan y producen cierta tierna conmoción. Porque es la resistencia lo que nos da la fortaleza para cambiar el estado de las cosas.
