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sábado, 8 noviembre 2025
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Elio: Una historia íntima en un contexto cósmico

Por Iara Reboredo

Con Elio, Pixar vuelve a poner en juego una fórmula que ha sabido manejar con maestría: contar historias de gran despliegue visual, construidas sobre temas emocionales universales como la pérdida, la identidad y el crecimiento personal. Bajo la dirección conjunta de Madeline Sharafian (el corto Burrow), Domee Shi (Red) y Adrian Molina (Coco), la película aspira a conquistar a toda la audiencia, y, si bien no alcanza el nivel de innovación o profundidad de sus antecesoras, logra conmover gracias a su sensibilidad, estética y tono humanista.

El protagonista, Elio Solís (voz de Yonas Kibreab), es un chico de once años que vive una profunda desconexión emocional debido a la reciente pérdida de sus padres, y ahora se encuentra al cuidado de su tía Olga (Zoe Saldaña), una exmilitar que trabaja en un programa espacial secreto. Elio se siente desplazado, incomprendido, incluso invisible, y se refugia en su mundo interior. Este retrato de soledad y autoaislamiento infantil es tratado con delicadeza y realismo, sin caer en dramatismos excesivos.

El giro fantástico de la historia se da cuando Elio es abducido por seres alienígenas del “Comuniverso”, una asociación galáctica de civilizaciones avanzadas que lo confunde con el representante de la tierra. Es ahí cuando Elio encara una aventura interplanetaria repleta de criaturas excéntricas, pruebas absurdas, decisiones heroicas y momentos de introspección, que funciona como una gran metáfora del tránsito emocional del protagonista.

A nivel visual, Elio es deslumbrante. Pixar demuestra, una vez más, su capacidad para imaginar mundos únicos y vibrantes. Cada espacio del Comuniverso está lleno de detalles fascinantes, con criaturas animadas con una expresividad que muchas veces supera lo caricaturesco. En paralelo, la música compuesta por Rob Simonsen aporta una capa emocional que intensifica cada escena clave sin robar protagonismo. La banda sonora se destaca por su sutileza: acompaña, guía y camina junto a los personajes.

A pesar de sus aciertos técnicos, Elio no está exenta de limitaciones. Su guion resulta en varios pasajes demasiado predecible, y de esta forma la historia avanza de forma lineal, sin grandes sorpresas, con una estructura bastante estándar que, si bien no estorba, tampoco desafía a lo convencional.

Algunas escenas, como los momentos en cámara lenta que buscan subrayar la épica de la secuencia, se sienten forzadas; desentonan con el ritmo general y pueden cortar la fluidez narrativa. Creo que esta elección estética, en vez de aportar, tiende a distraer. En este sentido, la película parece debatirse entre su voluntad de ser profunda y su necesidad de no alejarse demasiado del público más joven.

Comparada con títulos como Intensa-mente o Soul, que lograban combinar capas de complejidad psicológica con entretenimiento, Elio parece un paso atrás. No tanto por falta de ambición, sino por una ejecución que no termina de explotar todo su potencial. Hay emoción, sí, pero falta ese toque de genialidad narrativa que ha sido el sello de las grandes obras de Pixar.

A pesar de sus fallas, Elio conmueve. Lo hace no por giros espectaculares ni por escenas sutiles, sino por la honestidad de su propuesta. La película habla sobre lo que significa ser escuchado, entendido y aceptado. En un mundo (o universo) donde todo parece hostil o incomprensible, encontrar un espacio donde uno pueda ser auténtico es, quizás, la verdadera aventura.

Quiero hacer énfasis en la relación entre Elio y Olga, que se convierte en uno de los núcleos más emotivos de la historia. A través de su evolución, la película transmite una lección sencilla pero poderosa: la familia, biológica o elegida, es ese refugio donde uno puede reconstruirse. Elio logra hablarle tanto al público infantil como a adultos, con un mensaje claro y directo, pero sin subestimar la inteligencia del espectador.

Elio no es la obra maestra definitiva de Pixar, pero es una película sólida, sensible y visualmente creativa. Tiene momentos memorables, y, aunque su guion no arriesga demasiado y algunas decisiones de puesta en escena resultan cuestionables, el resultado final es una experiencia entrañable, ideal para ver en familia y conversar después.

Título: Elio.
Título original: Idem.
Dirección: Madeline Sharafian, Domee Shi y Adrian Molina.
Voces originales: Yonas Kibreab, Zoe Saldaña, Remy Edgerly, Brad Garrett, Jameela Jamil y Shirley Henderson.
Edición: Anna Wolitzky y Steve Bloom.
Música: Rob Simonsen.
Género: Animación, Sci-fi, Aventuras, Comedia.
Calificación: ATP.
Duración: 99 minutos.
Origen: EE.UU.
Año de realización: 2025.
Distribuidora: Disney.
Fecha de estreno: 19/06/2025.

Puntaje: 7 (siete)

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